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El mercadillo ya tiene fecha para volver a su puesto habitual después de once años en la Rambla Nova. Pese a la negativa de la mayoría de los marchantes a volver a la Plaça Corsini antes de acabar el verano, el próximo martes 24 de julio ya montarán la parada en el entorno del Mercat Central. Así se enteraron ayer los paradistas, cuando dos empleados de Espimsa –empresa municipal que gestiona los mercadillos de la ciudad– repartieron una circular con la fecha escogida. Los marchantes piden de nuevo al Ayuntamiento que se replantee la situación y que el traslado se produzca después del verano, en septiembre.
«En la última reunión, a la que no acudió la presidenta de Espimsa –la concejal Elvira Ferrando–, llegamos a una acuerdo con el consejo de administración y con el resto de asociaciones de marchantes para volver a Corsini una vez acabado el verano. Solamente pedimos que el Ayuntamiento respete esta decisión», explica el presidente de la Associació de Marxants de la Província de Tarragona, Josep Joaquim Gómez, quien añade que «estamos muy molestos».
Éste es ahora el posicionamiento de la mayoría de los marchantes que, hasta hace unas semanas, se negaban a trasladarse al entorno del Mercat Central. Algunas de sus preocupaciones son cómo descargarán el material y dónde aparcarán sus furgonetas y camiones que, hasta ahora, tenían detrás de la parada, en la Rambla Nova. Los marchantes también dudan sobre si habrá espacio suficiente para todas las paradas y lo cierto es que deberán reducir sus dimensiones. Gómez también insiste en la seguridad del recinto, ya que «el día que haya un incendio u otro altercado no sé cómo saldremos de ahí».
Por último, la asociación de marchantes cree que «vendemos más en la Rambla, porque es una calle recta. En cambio, en el entorno del Mercat Central hay muchos rincones y no todos tendremos las mismas posibilidades», explica Gómez. Aun así, la entidad es consciente de que la decisión está tomada. Sólo quieren retrasarla. «Para mostrar nuestra disconformidad, ayer, cuando nos entregaron la circular con la fecha de traslado, no la firmamos», asegura Gómez.
Por su parte, la presidenta de Espimsa y concejal de Comerç del Ayuntamiento de Tarragona, Elvira Ferrando, aseguraba hace unos días que «los marchantes se trasladarán a Corsini cuando las casetas que suministran energía, al menos una, esté fuera de la plaza». El derribo de una de las casetas depende del Ayuntamiento y la otra, de Endesa. Ambos aseguran que en el plazo de una semana ya serán historia.
«Es bueno para todos»
«El retorno de los marchantes a Corsini es bueno para ellos, para el Mercat Central y para el comercio del entorno. También para la ciudadanía, ya que dejaremos libre la Rambla Nova». Ferrando tiene claro que los marchantes deberán entrar en la plaza, descargar e irse. «Es un mercadillo, no un párking», asegura la presidenta de Espimsa.
Los marchantes ocuparán las calles Colom, Lleida, Reding y Gobernador González, además de la Plaça Corsini. Las paradas se darán la espalda entre ellas y mirarán hacia los comercios de la zona. Los martes son 94 paradas, y los jueves, 97.
