El pequeño comercio de TGN abrirá el sábado como protesta por el cierre de los fines de semana

El pequeño comercio está al borde del abismo. El cierre de los fines de semana ha acabado de hundir un sector que lleva casi un año al límite. Como medida de protesta, la patronal PIMEComerç llama a los comerciantes a abrir sus negocios este sábado. Las tiendas estarán abiertas, pero no se podrá acceder al interior ni comprar, a no ser que se vaya a recoger un pedido hecho por Internet. La patronal pide a los comerciantes que sean creativos y pongan un obstáculo para que los clientes no puedan entrar dentro de las tiendas. De esta manera, la policía no podrá cerrar ningún local, ya que no se estará incumpliendo la normativa anticovid.

La patronal pide a la Generalitat de Catalunya recuperar la normalidad en las calles, permitiendo la apertura de los establecimientos comerciales durante los fines de semana. Se trata de una reivindicación unitaria, en la que se han sumado las diferentes asociaciones de comerciantes del territorio.

«Hay un malestar generalizado, ya que tenemos constancia de que hay centros comerciales en la ciudad que funcionan con total normalidad», asegura Florenci Nieto, presidente de PIMEComerç Tarragona i Província, quien añade que «este agravio comparativo nos molesta y mucho, teniendo en cuenta que el 98,8% de la contratación laboral la genera la pequeña empresa y no las grandes marcas. Sin embargo, estas son las más agraciadas». Nieto insiste en qué «lo único que pedimos es poder trabajar. Si las cosas no cambian, veremos empresarios importantes de nuestras ciudades a las colas de la vergüenza, pidiendo comida».

Agravios comparativos

La protesta será seguida por las diferentes asociaciones de comerciantes del territorio, entre las cuales se encuentran las de Tarragona, Reus, Salou y Cambrils. «Pese no haber entendido nunca las medidas sanitarias, siempre las hemos acatado», explica Jacint Pallejà, presidente de El Tomb de Reus, quien asegura que no es lo mismo cerrar un sábado de enero que uno de marzo, «cuando la gente está más animada y hay una mayor incidencia».

Las asociaciones de comerciantes defienden que las medidas restrictivas deberían ser diferentes dependiendo del tamaño y condición del municipio. «Desde el punto de vista sanitario, quizás estamos mejor que hace un año. Pero, desde el económico, mucho peor», añade Pallejà.

Por su parte, el presidente de la asociación Shopping Salou, Juli Vilaplana, explica que «en nuestro caso, un municipio de costa, la mayoría de ventas las hacemos en fin de semana». Vilaplana denuncia que hay supermercados que venden productos no esenciales, mientras que los pequeños comercios están obligados a cerrar. «Una vez más, el pequeño empresario sufre un agravio comparativo. ¡Basta ya!», sentencia Vilaplana.

En esta misma línea, Tomàs Sierra, presidente de la Unió de Botiguers de Cambrils, asegura que «no es lo mismo un pueblo pequeño, que uno de mediano o grande». Sierra quiere dejar claro que el comercio está «ahogado» y que el sector da por perdida la campaña de Setmana Santa. «Ya no sabemos qué hacer. ¿Qué pasa? ¿Qué el virus es más agresivo durante los fines de semana que el resto de días?», se pregunta Sierra, quien pronostica que habrá muchos comercios que bajarán la persiana definitivamente cuando pase la Setmana Santa. Hace unos días, el presidente de PIMEComerç Tarragona i Provincia auguraba que el 30% ya no volvería a abrir.

La patronal pone a disposición de los pequeños comercios sus servicios jurídicos para tirar adelante cualquier reclamación. «Nos consta que ya ha habido denuncias contra la administración por no dejarnos trabajar», asegura Nieto.

Este sábado, las tiendas de Catalunya estarán abiertas de diez de la mañana hasta las dos del mediodía como protesta por la situación que están viviendo. No se podrá acceder al local ni comprar. Las asociaciones de comerciantes tienen la esperanza de que la reivindicación sirva para que la administración permita la apertura inmediata del sector durante los fines de semana.