«Es una persona serena, reflexiva, que piensa las cosas». Así describe el sacerdote Armand Puig al nuevo arzobispo de Tarragona, Joan Planellas. Puig fue decano y presidente de la Facultat de Teologia desde 2006 hasta 2015, cuando Planellas le sustituyó en el cargo. De ahí nace su estrecha relación de amistad. «Es una persona muy acogedora, siempre ha tenido muy buena relación con sus alumnos», explica Puig, quien nació en La Selva del Camp y actualmente es rector del Ateneu Universitari Sant Pacià.
El sacerdote destaca de Planellas la manera en la que combina la dimensión intelectual con la pastoral. «Es un hombre que ha escrito libros y artículos y, además, es un muy buen teólogo. Por otro lado, cuenta con una larga experiencia pastoral. Es rector de ocho parroquias. Puig asegura que «no me sorprendió la noticia. Planellas reúne todas las cualidades necesarias para ser el arzobispo de Tarragona».
Quiere abrir una investigación
Ayer, de manera simultánea, se celebraban dos ruedas de prensa en Girona y Tarragona. El nuevo arzobispo, desde Girona, dejó clara su voluntad de abrir una investigación para esclarecer los abusos que acabaron con las destituciones de dos rectores en Tarragona –el de Constantí y La Canonja, y el de Arbeca–. En este sentido, Planellas consideró «muy acertada» la línea que siguió la diócesis de Girona en relación a los casos de abusos vinculados con el municipio de Vilobí d’Onyar.
Planellas aseguró que se quedó «muy sorprendido» por el nombramiento y que su prioridad será trabajar para una iglesia para los pobres y para «volver al evangelio».