En enero de 2018 la gripe también provocó una alta mortalidad

La poca eficacia de la vacuna y la dureza de la enfermedad convirtieron el inicio de 2018 en un mes con abundante mortalidad en Tarragona

10 junio 2020 17:50 | Actualizado a 11 junio 2020 09:38
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

El análisis en perspectiva de las muertes que ofrece el INE deja una comparación imprevista e insólita. A pesar de que marzo de 2020 ha roto todos los récords en cuanto a fallecimientos (878), debido al impacto del SARS-CoV-2, no hay que ir demasiado lejos para ver otro mes especialmente letal. El segundo en la serie histórica en Tarragona en cuanto a acumulación de fallecidos es enero de 2018, cuando se registraron 868 fallecimientos, un dato también muy elevado.

Como en la mayoría de incrementos de mortalidad, la explicación hay que buscarla en el rol que puede tener el frío, las enfermedades respiratorias y, en concreto, en lo que suceda en cada campaña con la epidemia cíclica de la gripe y su repercusión en otras patologías. El propio Departament de Salut reconoció en su momento que la de 2018 y 2019 había sido una de las epidemias de gripe más fuertes de los últimos años y que había durado más. Otros datos ofrecidos por el INE: en febrero hubo 724 muertes globales en Tarragona y en diciembre de 2017 otra cifra elevada: 713.

Aquella epidemia causó la muerte de 157 personas en Catalunya, casi el doble que la anterior (90). También hubo una explicación científica a esa deriva. El propio Antoni Trilla, jefe del Servicio de Epidemiología del Hospital Clínic de Barcelona, ya advirtió de que «la actual temporada de gripe sería complicada» debido a la escasa protección de la vacuna. «La vacuna no cubre o lo hace de forma muy deficitaria dos de las cepas del virus que en estos momentos circulan de manera mayoritaria, la A-H3N2 y la B-Yamagata, eso nos hace prever en estos momentos que será una temporada de mayor impacto de la epidemia», anunció Trilla. Otros epidemiólogos también corroboraron que la vacuna no tuvo una cobertura tan certera.

Lo cierto es que la dinámica se corrobora al atender a las defunciones según la causa de muerte. Los decesos por enfermedades respiratorias pasaron de 808 casos en 2017 a 923 en 2018 en Tarragona. Es un 15% más. También subieron las muertes por la gripe (de 8 casos a 16) y por neumonía (de 161 a 175), alcanzando las cifras más altas de los últimos años.

Comentarios
Multimedia Diari