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El exalcalde de Tortosa Ferran Bel i Accensi (Tortosa, 1965) es el número ‘3’ del PDeCAT después de que hace pocas semanas fuera designado como secretario de organización de la formación soberanista.
¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza del 27 de octubre de 2017?
Una sensación agridulce. Había mucha gente ilusionada, pero lo cierto es que no se materializó. A partir de ese día se aplicó el artículo 155, a los pocos días hubo presos t exiliados y, además, continuó una represión brutal por parte del Estado español, con una situación judicial absolutamente ficticia.
¿Nota a la gente desilusionada un año después?
No, la gente está firme y decidida, como así se demostró en las elecciones del pasado 21 de diciembre.
«Debemos dejar atrás el Tenim pressa. Uno de los errores fue poner plazos. ¿La CUP? Nunca ha sido un socio para la gobernanza»¿Usted era partidario de votar la DUI o quería convocar elecciones autonómicas?
Cuando me preguntaron dije al President que convocara elecciones.
¿Fue un error forzar la declaración de independencia?
No, porque no sabemos qué habría pasado. Personalmente estoy convencido de que los resultados hubieran sido mejores que los del 21 de diciembre.
Mucha gente se habría desilusionado.
Depende de lo que se hubiera hecho después. Estoy seguro de que habría salido un Parlament netamente independentista, sin presos ni exiliados y sin el 155, que es lo peor que nos ha pasado.
¿El 47% avala seguir la vía unilateral?
No, y creo que con un 50% ó un 60% la reacción del Estado habría sido la misma.
«Necesitamos dar más sensación de unidad con ERC. ¿La Crida? No sabemos aún si es un movimiento o un nuevo partido político»Ningún país reconoció la declaración de independencia...
Seguramente porque tampoco la hicimos de una forma muy convincente. No hubo un Govern que pidiera un reconocimiento internacional.
¿El Govern estaba preparado?
Para una DUI con la beligerancia radical que hubo, no. Sí que se estaba para un proceso normal.
El sector comercial y empresarial ha sufrido mucho.
Hubo una incentivación y una gran presión para que las empresas cambiaran su domicilio social, pero nadie ha dejado de invertir en Catalunya.
Ha pasado un año y el soberanismo está muy dividido.
Debemos analizarlo, porque es una realidad. Las opiniones dispares siempre han existido, pero damos sensación de división. Y la gente no lo entiende, porque PP, PSOE y Cs van unidos para combatir el procés.
No ayuda que Torra y Aragonès digan que seguirán juntos hasta la sentencia de los juicios de los políticos presos...
Todo es mejorable. No soy partidario de poner límites a los gobiernos y las legislaturas. El juicio será un elemento esencial.
¿El objetivo de la legislatura es el referéndum?
Sí, y seguir avanzando a nivel internacional, con el President Puigdemont. Nos falta el apoyo de las instituciones y de los gobiernos. Todo esto sin olvidar que debemos gobernar para rebajar las listas de espera o mejorar las infraestructuras.
¿Debe olvidarse el «tenim pressa» y ser conscientes de que se trabaja a medio plazo?
Uno de los errores fue poner plazos, como los 18 meses o las negociaciones con la CUP
¿La CUP ha dejado de ser un aliado?
A nivel de gobernanza no lo ha sido nunca. No tienen vocación de gobierno.
Torra lleva seis meses como President. ¿Qué relación mantiene el PDeCAT con Junts per Catalunya?
Interlocutamos en lo que podemos. JxCAT fue una fórmula un poco improvisada. El PDeCAT fue muy generoso, pero hemos cedido demasiado.
¿A qué se refiere?
Fuimos muy generosos a la hora de establecer las listas, los pactos y en la definición de la legislatura. Deberíamos habernos implicado más para aportar nuestra experiencia.
¿Quieren estar más presentes en el día a día?
Así lo pediremos, debemos sentirnos más responsables de lo que pasa.
¿Cómo lo materializarán?
Con mucho diálogo y sin tensiones, entendiendo que en el grupo parlamentario hay muchos diputados del PDeCAT.
Hoy se presenta la Crida. Los presos piden la implicación del PDeCAT.
Debemos ver cómo se encaja y si es un movimiento paraguas o un partido político. La idea la vemos bien, pero debe recordarse que ERC y la CUP se han desmarcado. Y otro partido político no sé qué sentido tendría.
¿Pedro Sánchez tiene tiempo hasta noviembre para dar algún paso con los presos?
No soy partidario de establecer límites, pero tampoco de otorgar crédito sine die.
¿Qué debe hacer para tener presupuestos con ustedes?
Deben retirarse las acusaciones, no hay motivo ni para la rebelión ni para la sedición, y acabar con la prisión preventiva. Ni en Escocia ni en Alemania ni en ningún lugar se ha hecho nada igual con los políticos catalanes.
Pero esto depende del poder judicial, no del ejecutivo.
¿Cuántas veces hemos leído lo de «el Gobierno ordena al Fiscal General del Estado...»?.
