«Hay que hablar de quien sobrevive»

Mary Arcas tiene 47 años y ha tenido varios intentos de suicidio, incluido el último, del que salió de la UCI ‘inexplicablemente’. Hoy se dedica a hablar sobre salud mental en institutos como miembro de Obertament.

¿Se habla suficiente de suicidio?

No, es tabú y cuando se habla es con vergüenza, como bajito.

Así se corre el riesgo de que las personas que tienen ideas suicidas crean que solo les pasa a ellas.

Efectivamente, hace falta hablar de los que sobreviven, de gente que te explique en primera persona que también ha pasado por lo mismo y que hay un camino, que hay esperanza.

¿Siente que la juzgan?

Sí, yo tengo un trastorno bipolar diagnosticado por el que me han dado la incapacidad absoluta, pero todavía encuentro gente que me dice que se me pasará, que todos tenemos momentos buenos y malos... No te puedes parar a explicarles que a ellos el cómo se sienten no les impide trabajar o llevar una vida normal, como a ti.

¿Qué la ayuda a estar bien?

En mi caso el tratamiento no hace todo el efecto que debería hacer. Ahora lo que más me motiva es el poder hablar abiertamente de estos temas y dejar de esconderme y de aislarme ante todo el mundo.

¿Por qué todavía nos cuesta tanto saber en qué momento ir al médico si tenemos un problema de salud mental?

No es que no sepamos, es que tenemos muchos prejuicios. Tenemos miedo hasta a salir con un diagnóstico porque enseguida nos etiquetamos.... La gente sale del médico con un diagnóstico de hipertensión o diabetes y va comentándolo por allí y habrá quien le diga que también lo tiene. En cambio, cuando se trata de salud mental no lo hablas, ni siquiera dices que vas al psiquiatra... No obstante, creo que los prejuicios también podemos desaprenderlos.