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La multinacional IKEA tendrá en un mes el permiso para iniciar las obras de construcción de la tienda que, en 2018, abrirá en la ciudad de Tarragona y en la que invertirá unos 22 millones de euros. Según ha podido saber el Diari, el proyecto presentado el pasado 2 de enero por parte de la firma nórdica ya cuenta con casi todos los informes favorables. A día de hoy, el documento ha logrado el OK de Cultura, de Aviación Civil y de Carreteras, y sólo está a la espera de lograr el de Bombers, que podría llegar en pocas semanas.
Así lo asegura a este periódico el concejal de Urbanisme del Ayuntamiento de Tarragona, Josep Maria Milà (PSC), quien remarca que «todo está correcto para poder conceder el permiso en breve. Son licencias que no son complicadas de otorgar», afirma el máximo responsable municipal del área de Territori, quien espera que las obras de construcción puedan iniciarse antes de verano.
Tras el movimiento de tierras
Pese a tener todos los análisis positivos, la empresa líder del sector del mueble low cost deberá esperar a que se adjudiquen las obras de urbanización del plan parcial en el que se ubicará (el 10) para poder obtener el permiso municipal para iniciar las actuaciones.
De hecho, pasado mañana se reúne la mesa de contratación para analizar la documentación formal de las 19 ofertas que se han presentado para llevar a cabo las actuaciones de urbanización del nuevo barrio que se situará entre la T-11 y el anillo mediterráneo, en el que se edificarán 1.211 viviendas y vivirán unas 4.000 personas. Después de conocer las 19 compañías interesadas, los técnicos municipales emitirán sus informes sobre cada una de las propuestas para que, a finales de este mes de abril, se abran los sobres con las ofertas económicas. Con todo ello, desde el Ayuntamiento se calcula que la adjudicación definitiva de los trabajos de urbanización del nuevo sector, valorados en unos 18,5 millones de euros, podría ser a mediados de mayo. Será entonces cuando IKEA pueda recibir la licencia de obras.
A partir de la adjudicación de las actuaciones de urbanización del plan parcial, la compañía deberá esperar a que finalicen los movimientos de tierra para poder iniciar sus obras. Estos trabajos previos servirán para preparar la zona y situar el terreno a la cota marcada por el proyecto.
Desde ese momento, las obras de urbanización del plan parcial y de la edificación del inmueble de IKEA –que podría empezar en junio–podrán llevarse a cabo de forma simultánea. Las previsiones son que las obras puedan estar finalizadas para verano de 2018, justo después de la celebración de los Juegos Mediterráneos.
