Incertidumbre entre los acomodadores del teatro en Tarragona

La empresa adjudicataria ha dejado de prestar el servicio y los trabajadores se han quedado en la calle. El Ayuntamiento dice que el contrato ha finalizado 

27 octubre 2018 09:57 | Actualizado a 30 octubre 2018 13:37
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Incertidumbre entre algunos trabajadores de los equipamientos culturales de la ciudad, como el Teatre Tarragona o la Antiga Audiència. Según han explicado los damnificados al Diari, la empresa encargada de gestionar los acomodadores –Barna Porters– ha dejado de prestar el servicio «por desavenencias económicas con el Ayuntamiento», lo que ha provocado que los trabajadores se queden sin trabajo de un día para el otro. Desconocen qué pasará con ellos y si la empresa adjudicataria les va a subrogar o, por el contrario, están despedidos. 

«El pasado miércoles, día 18 de octubre, nos llamaron de otra empresa y nos dijeron que los actos que quedaban los haríamos con ellos. Que Barna Porters dejaba de prestar el servicio», explica una de las afectadas, quien prefiere mantenerse en el anonimato. Estos empleados trabajan solamente durante la temporada de teatros. «El Ayuntamiento nos dijo que este pasado miércoles entraba a funcionar ya la nueva empresa, pero aún nadie nos ha dicho nada», relata la trabajadora, quien añade que «ayer llamamos al Ayuntamiento, pero no nos esclarecieron nada». 

Los acomodadores tienen miedo de que la nueva empresa no cuente con ellos y no les subroguen. «Cuando Barna Porters ganó el concurso, el Ayuntamiento nos garantizó la continuidad. Pero no fue así. Nos tuvimos que buscar la vida y pedir que nos contratasen», recuerda la trabajadora, quien destaca que en el pliego de condiciones del contrato no figura la subrogación y, por lo tanto, no están obligados a hacerlo. 

La situación provoca inquietud entre los damnificados, quienes piden al Ayuntamiento dejar de ir «de aquí para allí», y reivindican más estabilidad laboral y sueldos dignos. «Queremos que se dejen de externalizar estos servicios y que el Ayuntamiento vigile que las empresas que prestan servicios públicos cumplan con la ley», explica la trabajadora, quien asegura que «Barna Porters se ha cansado de los incumplimientos del Ayuntamiento». El Diari ha intentado ponerse en contacto con la empresa, pero ésta no ha hecho declaraciones.

El concurso, de inmediato

Por su lado, desde la concejalía de Cultura del Ayuntamiento aseguran que la empresa Barna Porters ha finalizado el contrato, después de las prórrogas, y que actualmente se está tramitando la nueva contratación. Respecto a los saldos pendientes, «se está tramitando la facturación presentada como de manera habitual». El consistorio garantiza que los teatros de la ciudad no quedarán sin personal de servicio y asegura que «procuraremos en la futura adjudicación que se mantenga el personal contratado por la anterior empresa, aunque no existe la obligación de subrogar al personal». 

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