Indignación por el atropello mortal en Tarragona

Los vecinos de la avenida President Macià están recogiendo firmas para que se mejore la seguridad de los peatones 

01 octubre 2018 19:32 | Actualizado a 02 octubre 2018 07:30
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El trágico accidente que tuvo lugar el pasado sábado en la Rambla President Francesc Macià, que acabó con la vida de una vecina, ha sido el motivador definitivo para que los residentes de la zona se unan para reclamar una mejora en la seguridad vial del lugar. No era la primera vez que ocurría una desgracia similar. Hace tres meses, en el mismo tramo, otra mujer era atropellada en un accidente que le dejó secuelas físicas para toda la vida. 

El exceso de velocidad y la poca visibilidad son los factores que temen los vecinos cuando deben cruzar la calle y ya son muchos los sustos que se han llevado por culpa de estos. A raíz del penúltimo accidente ocurrido, el Ayuntamiento decidió poner unas señales de advertencia «con lucecitas ridículas que de día ni se ven», afirma indignada Carmen Valentina, dueña de la mercería situada enfrente del paso de cebra donde ocurrió el accidente mortal el pasado sábado. 

Carmen, quien escuchó el golpe, está recogiendo firmas para reclamar al Ayuntamiento las medidas necesarias con tal de no volver a revivir una escena similar: «Me siento obligada a hacer algo porque me da mucha rabia que pasen estas cosas y no creo que sea necesario que ocurra otra desgracia para poner soluciones». Por ello, los vecinos piden, al menos, un paso de peatones elevado en todo el tramo y más señales viales para impedir el exceso de velocidad de los vehículos que circulan por la zona. 

Carmen y demás vecinos se encuentran muy afectados e indignados por lo ocurrido, ya que además conocían de cerca a la fallecida. Matías Salas, el dueño del bar Matías, ubicado en la zona, señala que la víctima era amiga de su familia y se siente realmente consternado por lo sucedido. Afirma temer por la vida de su hija, que camina diariamente por ese trayecto. La dueña de la mercería, Carmen, decidió poner un cartel reivindicativo en la puerta de su negocio ubicado en la ya mencionada calle con el fin dar visibilidad a la situación que están viviendo en la zona y rendir homenaje a la víctima.

La Guàrdia Urbana ha abierto diligencias judiciales por lo ocurrido. Sin embargo, no ha imputado a la conductora ningún delito ya que dio negativo en las pruebas de alcohol y drogas. Al parecer, la condura aseguró no haber visto a la víctima cuando cruzaba por el paso de peatones.

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