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¿Podemos decir que estamos ante la crisis sanitaria más importante, a nivel global, de los últimos 100 años?
Por la magnitud de afectados y el revuelo que está generando probablemente estamos ante una de las crisis sanitarias más importantes, pero no ha sido la única del último siglo. Sin querer ser exhaustivo habría que recordar otras como la pandemia de gripe de 1918 -también conocida como ‘gripe española’-, que causó la muerte entre 50 y 100 millones de personas en todo el mundo durante los años 1918 y 1919; la epidemia de gripe A H1N1 del año 2009, que afectó a un 12% de la población mundial con unos 500 muertos; o múltiples brotes epidémicos de Sarampión sobre todo en países del Este de Europa en los últimos 10 años, entre otros.
¿Qué tiene de excepcional este virus Covid-19, que no tengan otros como el de la gripe común, que nos ha llevado a tomar medidas tan extraordinarias?
Hay dos aspectos diferenciales importantes. Por un lado este virus, el SARS-CoV-2, no había afectado nunca antes a humanos y por lo tanto no hay ningún humano inmunizado, mientras que muchos humanos hemos pasado una gripe en algún momento y algún recuerdo inmunitario tenemos. Por otro lado, para el virus de la gripe disponemos de una vacuna que nos protege, aunque se vacuna poca gente pero esto reduce mucho la cadena de transmisión, lo que no disponemos respecto al nuevo coronavirus.
¿Porqué cree que cuando han aparecido otros virus en los últimos años no se han tomado estas medidas y en cambio ahora hemos llegado a este extremo?
La respuesta para la contención de un brote epidémico debe ser proporcional a la magnitud de la propagación entre la comunidad y la gravedad de los efectos que produzca. La activación de una pandemia tiene 6 fases o periodos, de los que la fase 1 y 2 es el período entre brotes cuanto se comporta cíclicamente, pero cuando debuta de nuevo, como es en este caso, va de la fase 3 a la fase 6, y en cada nivel pandémico le corresponde un nivel de actuación. Algunos brotes pueden contenerse sin llegar a la fase 6, y por eso no siempre se aplican todas las medidas.
¿Cree que nuestras administraciones están tomando las medidas correctas para frenar al Covid-19?
Se están siguiendo las recomendaciones dictadas por los organismos sanitarios mundiales, como la OMS, el Centers for Disease Control and Prevention, o el Cetro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades, entre otros. Los mejores epidemiólogos del país están gestionando la pandemia siguiendo las recomendaciones aceptadas científicamente y asesorando a la administración Sanitaria. En mi opinión se está haciendo lo correcto.
¿Cómo podemos encontrar el equilibrio entre decirle a la población que se quede en casa y no caer en el alarmismo?
Es muy difícil poner el límite entre el rigor de las prohibiciones y no caer en el alarmismo, pero la población debe entender que cuando se le dice que se confine, esta decisión está basada en los datos de que se disponen y se debe cumplir. A veces también se minimizan las recomendaciones o consejos que se dan y no se siguen pensando desde un punto de vista individual mientras que la contención de la epidemia se basa en acciones globales.
¿Está preparado nuestro sistema sanitario (el catalán) para hacer frente al coronavirus?
Todo dependerá de la altura de la curva epidémica y su amplitud. Cuanto más picuda más demanda asistencial simultánea y cuanto más plana menos presión sobre el sistema sanitario. Por eso es muy importante el confinamiento, para ralentizar la propagación del virus y aplanar la curva. El área de la curva (casos totales) será probablemente del 70-80% de la población, ahora bien, no es la misma presión sobre el sistema sanitario que necesitemos asistencia todos el mismo día, que una persona cada día durante muchos meses.
Un mensaje para la ciudadanía en estos momentos de cierta angustia...
Que siga las recomendaciones que se hacen, que se lave las manos a menudo, que sean cuidadosos con respetar la higiene respiratoria (utilizar pañuelos de papel desechables, toser sobre el codo, ....), interactuar socialmente lo menos posible y en cuanto haya disponibilidad de una vacuna administrársela. Quisiera hacer un llamamiento a los antivacunas para que abandonen sus teorías negativas sobre la vacunación, porque en cuanto no tenemos vacunas y todos somos susceptibles se pueden producir pandemias de estas dimensiones que no sucederían si nos vacunásemos.
