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Medio centenar de activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) llegaron poco después de las 10 horas delante del Palau de Justícia de Tarragona para arropar a Rosa Maria Rodríguez, una de las portavoces de la formación acusada de coacciones a un delegado de oficina de Ibercaja.
Rodríguez está acusada junto a Edgar Latorre, otro de los integrantes de la plataforma, de coaccionar a un delegado de esta entidad bancaria en una protesta en la oficina tarraconense de Ibercaja este pasado verano.
Ayer la acusada prestó declaración ante el Juzgado de Instrucción Número 1 y se declaró inocente a la salida de la sala. El próximo miércoles día 25 deberá comparecer Latorre por la misma acusación.
Hasta su salida, los 50 integrantes de la PAH esperaron enfrente la puerta del Palau de Justícia para arropar a su compañera y gritando proclamas como «sí se puede» en alusión a evitar los deshaucios por la imposibilidad de afrontar la hipoteca. La misma PAH adelantó que las protestas a entidades bancarias proseguirán a pesar de esta judialización de sus actividades.
