La Part Alta de TGN tiene identificados quince puntos negros en los que se tira basura

La mayor parte coinciden con los espacios en los que se sitúan las papeleras móviles, que se colocan a las 19.30 horas

02 octubre 2020 18:10 | Actualizado a 03 octubre 2020 08:00
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Jueves sobre las doce del mediodía, una chica sale de casa con la bolsa de la basura y, sin inmutarse, la tira al suelo y sigue con su camino como la cosa más normal del mundo. La ha dejado en la calle Calderers, en el punto en el que se colocan las papeleras móviles. Sin embargo, la empresa de limpieza no las pone hasta las 19.30 horas de la tarde, por lo que esta bolsa muy probablemente seguirá allí todo el día.

No es una acción puntual ni se trata del único punto problemático en la Part Alta. Si uno pasea por el barrio lo comprobará. De hecho, el Ayuntamiento de Tarragona asegura que tiene identificados hasta quince rincones en los que se acumulan residuos abandonados. Los hay en la calle Comte, Mediona, Civaderia y Riudecols. También en el Trinquet Nou y la calle Ferrers. La mayoría de estos –en total diez– coinciden con las ubicaciones de los «contenedores» móviles, pero estos vecinos no respetan la franja horaria de dos horas y media en la que sí puede depositarse la basura.

El Ayuntamiento de Tarragona asegura que «cuando pueden identificarse los infractores» estos son sancionados. Según datos proporcionados por la administración local, en lo que va de año se han registrado cuatro casos, una cifra inferior a la de 2019, cuando se interpusieron 24 multas a usuarios domésticos y otras siete a comercios. Asimismo, cuando no pueden obtenerse los datos para tramitar la sanción, se procede a mandar un aviso. En este caso, hasta el día 15 de septiembre se habían mandado un total de 57, de los cuales la mayor parte (49), eran de carácter comercial y, por tanto, estaban relacionados con el no uso o el mal uso del servicio, entre otros.

También hay algunos espacios en los que sus vecinos tiran la basura de forma recurrente, sin que haya las papeleras móviles. Es el caso de la calle Trinquet Nou, donde el Ayuntamiento puso un cartel y, a pesar de ello, hay quien no se ha sentido aludido. Esto hizo que el concejal de Neteja, Jordi Fortuny, mandara el pasado 12 de agosto un aviso en el que recordaba que el incumplimiento de las obligaciones recogidas en las ordenanzas está tipificado como una falta leve que implica una sanción de 100 euros.

Hace algunos años se planteó la posibilidad de implantar la recogida puerta a puerta para facilitar que sus vecinos reciclen, ya que ahora tan solo hay dos islas de contenedores dentro del barrio que lo permiten. «Es un tema que estamos estudiando y analizando porque no es fácil», indica el edil republicano. Este no es partidario de tirar adelante una solución que «no satisfaga» y «solucione el problema». «El puerta a puerta será un éxito cuando seamos capaces de eliminar el incivismo, que es en lo que estamos volcados ahora», indica el segundo teniente de alcalde.

El servicio actual genera críticas. «Está claro que ahora está más sucio que hace dos años. Se riega más y se limpian las calles, pero el tema de la recogida no funciona y la solución esta de las papeleras móviles es un pegado que no funciona, porque cuando han echado tres o cuatro bolsas ya está lleno», indica el presidente de la Associació de Veïns de la Part Alta, Manel Rovira.

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