La Plaça dels Carros de TGN tendrá su Mercat de Pagès antes de fin de año

Espimsa mantiene conversaciones con Unió de Pagesos para hacer un llamamiento de cara a los productores, mientres se está hablando con vecinos y comerciantes para fijar el día

13 septiembre 2020 20:20 | Actualizado a 14 septiembre 2020 08:34
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El pleno del mes de febrero aprobó una moción presentada por la CUP en la que todos los partidos apoyaron por unanimidad la propuesta de ubicar un Mercat de Pagès en la Plaça dels Carros. Un proyecto que la empresa de mercados Espimsa no quiere que se quede en una simple declaración de intenciones y, en este sentido, ya ha empezado a trabajar para que antes de que acabe el año sea una realidad.

Así lo confirma el presidente de Espimsa, Dídac Nadal, quien indica que «pasada Santa Tecla deberíamos poder acabar de ligar algunas cuestiones, que nos deben permitir que de cara al último trimestre del año esté funcionando. Esta es la voluntad».

Uno de los «obstáculos» con los que se ha encontrado la empresa pública es que el texto aprobado especificaba que sería un mercadillo para «la compra de alimentos, sin intermediarios». «Si hacemos lo que dice la moción, tan solo pueden ser paradas de productores y esto con la cartera de clientes que tenemos en Espimsa es imposible», explicaba su presidente.

Ahora, se están explorando perfiles similares y se ha establecido contacto con el sindicato Unió de Pagesos para hacer un llamamiento entre los asociados, que permita acabar de completar una cifra óptima de participantes. Asimismo, quiere abrirse la posibilidad a que otros colectivos de la ciudad puedan participar, como es el caso de las floristerías. «Queremos hacer un mercado con encanto, que después si queremos podrías llevarlo a otros sitios», concretaba el máximo responsable de los mercados.

Hay un segundo aspecto que debe acabar de decidirse. Es el del día en el que se celebrará el mercado. «Es un problema porque si lo hacemos en domingo, los negocios del barrio estará cerrados y no se verán beneficiados, por lo tendría que ser de lunes a sábado», indica Nadal. Además habrá que cuadrarlo con la agenda de los paradistas. Los sábados muchos de estos están en la Plaça del Fòrum, los martes y jueves son los dos días de Corsini, los miércoles de Valls y los viernes están en El Vendrell. Con estos ingredientes encima de la mesa, Espimsa está trabajando para acabar de formular una propuesta que después será la que se presentará a los vecinos. De hecho, ya se han producido algunas conversaciones de coordinación durante los últimos meses, en las que también ha participado el sector comercial del Barri del Port.

El objetivo que persigan ambas partes es que el Mercat de Pagès se convierta en un eje vertebrador de una parte de la ciudad, con un sector comercial muy vulnerable. «Debemos conseguir que sea un mercado atractivo, pero que no constituya una competencia los negocios del propio entorno», añadía Nadal.

Tras muchos años de abandono y degradación, los vecinos del Barri del Port se muestran optimistas delante de este proyecto. De hecho, es una de las demandas que hicieron durante las diversas reuniones antes de las pasadas elecciones municipales. «Sabemos que se está mirando y estamos a la espera de que acabe de concretarse», apuntaba la presidenta de la Associació de Veïns, Mari Carmen Puig. Destaca también que muchos de estos vecinos tienen que desplazarse hasta la Part Alta, para hacer la compra los sábados en el Mercat del Fòrum. «Esto es un problema, porque hay mucha gente mayor que no puede», añade.

Esta entidad vecinal defiende que un mercado semanal serviría como elemento dinamizador del comercio y de un espacio que se ha deteriorado a marchas forzadas. «La reivindico mucho la Plaça dels Carros. Es una espina que tengo clavada, porque me da mucha pena ver cómo está», sigue argumentando Puig. Desde que se hicieron las obras de supresión del paso a nivel, en 2011, no se ha hecho ninguna inversión destacable. Y a la degradación de los edificios del entorno hay que sumarle los excrementos de palomas y la inseguridad, lo que ha acabado convirtiéndola en un sitio de paso.

En el estudio que hizo el Ayuntamiento de Tarragona sobre la calidad del espacio público también se analizaba el comercio. En el caso del Barri del Port, los observadores que hicieron este trabajo contabilizaron la cifra de 482 ubicaciones comerciales. Del total, 253 permanecen inactivas, lo que representa más de la mitad, y de este 50% tan solo 51, es decir el 10%, se dedica a la venta al detalle.

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