La Tabacalera: la asignatura pendiente

Punto de inflexión. Tarragona dará el gran salto urbanístico cuando abra definitivamente la Tabacalera. El Ayuntamiento da hasta el 23 de octubre para presentar las propuestas       

19 julio 2018 17:51 | Actualizado a 19 julio 2018 18:00
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Tarragona sigue esperando desde hace años que la Tabacalera empiece definitivamente a caminar. El espacio, que cuenta con unos 80.000 metros cuadrados de superficie, es la gran asignatura pendiente de la ciudad para poder dar el gran salto urbanístico y cohesionar el núcleo urbano con la zona más próxima al río. 

Aparte del crecimiento por Llevant, con la futura construcción del barrio de la Budellera y la transformación del actual entorno del Gimnàstic, la recuperación de todo el complejo situado entre la Avinguda Vidal i Barraquer y el Passeig de la Independència debe ser la gran apuesta en infraestructura cultural de los próximos años de la ciudad. Y es que espacios de esta envergadura son la envidia de cualquier ciudad. 

La histórica fábrica de tabacos cerró hace más de una década: el 23 de marzo de 2007. De esto hace ya más de una década, pero lo cierto es que el complejo sigue a medias: con algunas dependencias municipales pero sin que sea un polo de atracción que genere una destacada actividad social y económica y, lo más importante, sin ser una referencia para los tarraconenses.  

Debe decirse, esto sí, que durante los últimos años se han dado pasos hacia adelante para ir recuperando, progresivamente, el  uso del emplazamiento. El primero se dio en 2010, con la retirada de la valla perimetral que impedía el acceso ciudadano, así como la adecuación de los almacenes. Esa actuación, que fue impulsada por el Gobierno Central de José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) al inicio de la crisis económica, hizo posible que se adaptara el actual jardín, que ha permitido abrir el recinto y ampliar la avenida Vidal i Barraquer, con una primera intervención integral que supuso una inversión de ocho millones de euros.

Para mí, ese paso se dio en la buena línea, ya que revalorizó una zona que, hasta entonces, vivía de espaldas a la ciudad. Durante varios años tuve la suerte de vivir en aquella zona y lo cierto es que agradecí la apertura de la zona verde.

El segundo punto de inflexión fue en 2012, con la puesta en marcha del jardín vertical y el montaje de la pantalla gigante... que al final ha sido un desastre. La idea inicial era ambiciosa, pero la falta de mantenimiento ha provocado que, por desgracia, haya dejado de funcionar. Me temo que solo ha servido para generar polémicas como, por ejemplo, la retransmisión de partidos de la selección española de fútbol en 2012 o el polémico anuncio que, en 2013, vetó el propio Ayuntamiento por una exposición sobre orgasmos de la artista Mireia Sallarès. Esto, sin tener en cuenta las quejas de los vecinos... Asimismo, el estado en el que se encuentra el acceso a los almacenes es lamentable, siendo los excrementos y la suciedad los protagonistas del espacio. 

Los finalistas, después de verano
A principios de 2017 se anunció el acuerdo entre Generalitat y Ayuntamiento para definir el proyecto para desencallar la situación. Después de meses de tramitación y de haber arreglado algún error material, finalmente el Ayuntamiento ha dado de plazo hasta el 23 de octubre para que puedan presentarse las propuestas del plan funcional del emplazamiento. Será entonces cuando se determinarán los cinco proyectos finalistas, que deben definir la hoja de ruta del futuro de la Tabacalera. 

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