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La oposición en el Ayuntamiento de La Bisbal del Penedès (ERC y una concejal no adscrita, que suman seis votos) ha tumbado el presupuesto para 2019 del gobierno del PDeCat (5 concejales).
Así, las cuentas de 2018 quedan prorrogadas. Una de las consecuencias es que el Ayuntamiento podrá hacer gasto corriente, pero no inversión. El concejal de Hacienda, Pere Saumoy, explicó que el superávit previsto para 2019 era de 363.471 euros. También asegura que la capacidad de financiación del Ayuntamiento es de 886.169 euros. La deuda llega al 40,47%, por debajo del tope del 110% que permite la Ley.
Pacto
El pasado verano el gobierno de PDeCat y PSC quedó roto después de que la concejal socialista Maguy Antolín presentase una moción de censura junto a ERC. La alcaldesa Agnès Ferré la destituyó y Antolín pasó a la oposición. La moción no prosperó y el PSC expulsó a su concejal del partido.
La imposibilidad de aprobar los presupuestos no evita que puedan acabarse obras que ya estaban iniciadas con las cuentas de 2018. Quedan en el aire trabajos como la mejora de la red de agua, adecuación de un local social o de una vivienda social, que estaban previstos para 2019.
El próximo año habrá elecciones y permitiría que en junio pudiese presentarse un nuevo presupuesto y en función de la correlación de fuerzas, aprobarse.
