La oposición exige a Ricomà más Consells de Districte

La gran promesa electoral del alcalde Pau Ricomà (ERC) se tambalea. 17 meses después de tomar posesión de la vara de la Plaça de la Font, el proyecto para reorganizar la ciudad en cinco grandes Consells de Districte no tiene aún los apoyos suficientes en el pleno municipal, e incluso durante el primer trimestre de 2021 podría quedarse definitivamente en un cajón o ser modificado sustancialmente para poder lograr los 14 votos necesarios para que la propuesta pueda tirar hacia adelante.

En principio, la voluntad del político de Esquerra Republicana es la de dividir la ciudad en cinco grandes sectores: Ponent, Llevant, Eixample (zona de la Rambla Nova y de la Plaça Imperial Tarraco), Centre (con Part Alta y Part Baixa incluidas) y Nord (Sant Pere i Sant Pau, Sant Salvador y Sant Ramon). Pese a ello, las formaciones que no están en el ejecutivo local exigen ahora una modificación del primer esbozo del reglamento, de forma que las cinco zonas inicialmente delimitadas se conviertan en más.

Así se puso de manifiesto ayer, durante la comisión telemática en la que se analizaron varios puntos del primer redactado, y en la que se escenificaron divergencias importantes, tanto en el fondo como en la forma de los nuevos entes de participación, previstos inicialmente para 2021. Por ello, ahora se abre un nuevo periodo de diez días para que cada formación presente nuevas enmiendas, de forma que pueda convocarse un nuevo encuentro para antes de Navidad y poder llevar el acuerdo al pleno ordinario de enero o de febrero.

Sin embargo, la situación parece encallada, hasta el punto de que los Consells podrían quedarse en agua de borrajas si no se llega a un documento de consenso entre finales de este año y principios de 2021. «Si la negociación no llega a buen puerto perderemos una gran oportunidad», lamenta la concejal del gobierno responsable del proyecto, Paula Varas (ERC), quien resalta que los Consells «deben tener un papel muy importante en la gestión de los presupuestos participativos y en el nuevo POUM».

El PP no participa

La comisión de ayer estuvo marcada por la ausencia del PP, que rechaza participar de una comisión que pretende crear más «estructuras y organismos reduntantes», según indica el portavoz popular, José Luis Martín.

Por su parte, portavoz del PSC –Sandra Ramos– lamenta que el proyecto «sigue sin avanzar». De hecho, los socialistas hacen una enmienda a la totalidad y enfatizan la necesidad de que la división no sea en cinco distritos, sino en once. «Estos son los que ya existen a nivel electoral, no estamos inventando nada», afirma la edil. Asimismo, también propone cambiar el nombre para que los sectores se denominen «Consells de Barri».

De manera parecida se expresa Sonia Orts (Cs). «Con solo cinco distritos habrá 40 ó 50 personas en los plenos, y no será una herramienta ágil. Además, no existe la misma problemática en Sant Salvador que en Sant Pere i Sant Pau. Debe haber más», indica.

Desde Junts, Cristina Guzman considera «imprescindible» cambiar el actual redactado para que los Consells «sean un órgano real de participación ciudadana». Por ello, recalca que «debe aumentarse el número de distritos para poder atender mejor a cada una de las áreas de la ciudad». Junts, además, quiere cambiar la actual ordenación prevista.

Finalmente, Laia Estrada (CUP) critica que los Consells «siguen muy verdes, y no es por la pandemia», y resalta que su formación «no votará a favor de una propuesta burocrática y jerárquica, que no garantiza una participación real de las entidades». Pese a ello, abre la puerta a una posible abstención «si se concreta la cantidad y el mecanismo para decidir una parte del presupuesto participativo». Este posicionamiento, sin embargo, podría no ser suficiente para que los Consells puedan ser una realidad.