La triple vía del parking de Colom

El Ayuntamiento de Tarragona tiene una nueva patata caliente sobre la mesa. Finalizado el contrato de alquiler con la constructora del Mercat Central para que Espimsa explote el aparcamiento soterrado de Colom, ahora el ejecutivo de la Plaça de la Font deberá decidir qué hacer con la instalación. Para ello, cuenta con un trío de vías: adquirir el espacio por 4,5 millones de euros;  firmar un nuevo arrendamiento; o quedar al margen de la explotación del recinto, de forma que pase a ser completamente privada. 

Sobre ello se habló el pasado lunes en el consejo de administración de la compañía que gestiona el Mercat Central –Espimsa–, después de que la empresa propietaria del equipamiento –Lantania– enviara el pasado 17 de septiembre una carta al presidente de la empresa municipal, Dídac Nadal (Junts), en la que se le recordaba que el contrato entre ambas partes caducaba el pasado 26 de septiembre, según se indica en el documento al que ha tenido acceso el Diari. «Les recordamos que finaliza el plazo para que Espimsa pueda ejercer el derecho de reversión anticipada de la explotación del aparcamiento», indica en la misiva el representante de la firma privada, José Alberto Carrasco. 

Asimismo, Lantania «solicita» a la compañía dependiente del Consistorio que «nos indiquen si, finalmente, está interesada en ejecutar el derecho de reversión o si, por el contrario, será Lantania quien, una vez finalice el periodo de arrendamiento previsto en el contrato, comenzará a explotar el aparcamiento para lo que, en su caso, se deberá disponer de un traspaso ordenado de las instalaciones», se afirma en la carta.  

Los paradistas, a favor

Según el acuerdo con la constructora del Mercat firmado hace tres años, el precio de recompra del espacio, que cuenta con 326 plazas, se estipuló entonces en los 5,9 millones de euros, si bien durante este tiempo Espimsa ha arrendado el espacio, por lo ahora el valor de la adquisición es de 4,5 millones. Sin embargo, con el contrato ya expirado, la administración municipal debe tomar una decisión en breve, que llega en un momento complicado por la crisis sanitaria, social y económica que hay a raíz de la pandemia por el coronavirus. 

El presidente de Espimsa, Dídac Nadal, reconoce que hay una «negociación abierta», tanto con el Ayuntamiento como con la propia empresa privada. «Es un parking pequeño, de solo dos plantas para aparcar porque la primera es toda para la logística del Mercat», recalca. En caso de llevar a cabo la compra, la duda es qué ente municipal debería asumirla, ya que el Consistorio ya cuenta con una firma dedicada a los parkings, como es Aparcaments Municipals. El edil de Serveis Centrals, Jordi Fortuny (ERC), reconoce que «es un tema interesante que actualmente está en estudio». Por su parte, la presidenta de los paradistas, Montse Bertran, cree que el parking «debe pertenecer a la ciudad, por lo que la gestión debería ser pública, ya sea desde Espimsa o Aparcaments». 

Cs y CUP, en contra

Las formaciones de la oposición están divididas. «Aparcaments tendría que gestionar estos  parkings y seguir en la línea de implantar la tarifa máxima –5,5 euros al día– de todos los aparcamientos que el PP rebajó en el anterior mandato», afirma José Luis Martín (PP), mientras que Sandra Ramos (PSC) cree que «debería intentar rebajarse el precio para asegurar la gestión pública». 

Por su parte, Sonia Orts (Cs) considera que «en la situación en la que nos encontramos, pensamos que no es el momento ni la prioridad invertir más de cuatro millones en la compra de un parking». En la misma linea se expresa Laia Estrada (CUP), quien resalta que la operación «supone un elevado coste económico, en un momento muy complejo para las arcas municipales». En este sentido, asegura que este dinero debería priorizarse para partidas de «vivienda y educación».