Las gradas del Circ estarán listas con 7 meses de retraso

Los motivos de la demora en la recuperación del tramo de Sedassos son las modificaciones del proyecto inicial y las obras de peatonalización de las calles Salines y Sant Domènech

08 enero 2018 09:42 | Actualizado a 10 enero 2018 00:13
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Los trabajos de recuperación de las gradas de Circ Romà de Tarragona aún se alargarán unas cuantas semanas más. El motivo son las obras que se están llevando a cabo en la calles Salines y Sant Domènech –detrás de la Plaça de la Font–, que empezaron en agosto y están durando más de lo previsto, a causa de algunos hallazgos arqueológicos importantes en la zona. Todo apunta a que será en el próximo mes cuando la recuperación de las gradas del Circ de la Plaça dels Sedassos se convierta en una realidad. 

Mientras tanto, los expertos estudian la colocación de una estructura de acero forrada con listones de madera, que ayude a entender la función de este monumento durante la época romana. Esta estructura se encuentra en el taller, pero está previsto que se empiece a instalar antes de acabar este mes de enero, una vez terminen las obras de peatonalización de las calles Salines y Sant Domènech. De esta manera se darán por finalizados unos trabajos que deberían haber estado listos en el pasado mes de julio.

La recuperación de las gradas del Circ Romà –del tramo de la Plaça dels Sedassos– han sido objeto de debate y polémica entre distintos actores de la ciudad. Desde el Ayuntamiento se ha decidido cambiar el proyecto y modificar la idea inicial.

Estaba previsto que las gradas fueran como una plaza abierta pero, desde un primer momento, tanto los vecinos como los expertos en patrimonio se han mostrado contrarios.

«Nos da miedo de que el espacio se convierta en un teatro donde hacer espectáculos, o en un lugar perfecto para hacer botellones», explica Andreu Ximenis, miembro de la plataforma Farts de Soroll y vecino de la Plaça dels Sedassos. Por esto, desde el Ayuntamiento se decidió escuchar a los vecinos y a los especialistas para configurar el plan de usos que, de momento, no está hecho.

Pero la concejal de Patrimoni del Ayuntamiento de Tarragona, Begoña Floria, solamente tiene claro que «será un espacio accesible y visitable, pero no abierto». Hasta aquí puede leer. Floria asegura que se redactará el plan de usos «y se decidirá de qué manera se pone en valor el monumento» una vez se terminen los trabajos de recuperación. Lo que está claro es que las renovadas gradas servirán para entender qué pasó allí dos mil años atrás.

Con esta intervención se conseguirá recuperar un espacio que  hasta ahora estaba muy degradado. Además, el proyecto contempla, en una nueva fase, museizar una parte, convirtiendo el Circ Romà en una circuito visitable. El coste de las obras de la primera fase era de 242.000 euros, pero han sido tantas las modificaciones que ha sufrido el proyecto que se desconoce el coste final. 

La opinión de los expertos

El tema de las gradas del Circ Romà ha estado, en muchas ocasiones, sobre la mesa de debate de la Reial Societat Arqueològica Tarraconense (RSAT), que siempre se ha mostrado contraria a la idea del Ayuntamiento. «No es necesario que en los monumentos se reproduzca la actividad que se llevaba a cabo hace dos mil años. Se debe actuar con prudencia. Ya hay suficientes lugares donde se hacen recreaciones, como por ejemplo el Amfiteatre Romà», opina Xavier Allué, miembro de la RSAT, quien añade que «convertir los monumentos de la ciudad en un parque temático de la época romana no es una buena idea».

Tanto la RSAT como los vecinos de la zona se han mostrado preocupados por la utilización futura que va a darse a este espacio. Pero también han criticado el impacto que generará la reconstrucción en un monumento de estas características. La obra ha avanzado mucho y, por el momento, ya se puede ver el muro de obra construido a base de ladrillos, lo que no cuenta con la aprobación de los expertos.

Los técnicos aseguran que este color de los ladrillos se parecerá más al de la piedra con el paso del tiempo. Además, se trata de un proyecto «reversible, que si no gusta, siempre puede desmontarse».

El proyecto ha sufrido modificaciones para reunir los gustos de todas las partes. Finalmente, solamente se han reconstruido dos de las tres gradas que estaban inicialmente previstas y la escalera de acceso será interior.

Estos cambios, sumados a las obras de peatonalización de la calle Salines y Sant Domènech, son los responsables de la demora de las obras. Según el Ayuntamiento, durante el mes de febrero, los trabajos de recuperación de las gradas del Circ Romà del tramo de la Plaça dels Sedassos habrán terminado.

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