Llega la hora de hacer política

La época de las mayorías absolutas, de los grandes pactos de gobierno y del oasis reusense ya son historia. Los tiempos han cambiado y con ellos la forma de percibir la política que tienen los ciudadanos. El ejemplo más claro lo hemos encontrado en Reus donde los partidos hegemónicos y más tradicionales han perdido el peso que tradicionalmente habían tenido (algunos, como el PSC y el PP, más que otros) y otras alternativas han emergido con una fuerza brutal. Sin la presencia de una formación que pudiese aglutinar el voto descontento e indignado de gran parte de la sociedad (del estilo de Barcelona en Comú de Ada Colau o Podemos, a nivel estatal), la Candidatura d’Unitat Popular de Reus ha pescado en río revuelto y se ha marcado el tanto de llevarse gran parte de un electorado que, al margen del proceso soberanista o de tener un ADN independentista, han visto en la CUP el único partido capaz de remover los cimientos de la política reusense, excesivamente judicializada y marcada por el caso Innova durante los últimos meses. Otro claro ejemplo del voto de castigo que los reusenses han infringido a los partidos del status quo es el aterrizaje en el salón de plenos de Ciutadans. Todo el mundo contaba con la irrupción del partido que preside Albert Rivera en el consistorio reusense, aunque pocos esperaban que lo hiciese con un descaro tal que le ha propiciado cuatro concejales, los mismos que el PSC. Han pasado poco más de 24 horas desde que se abrieran las urnas y los rumores e incógnitas sobre los posibles pactos que podrían producirse para darle a Carles Pellicer una alcaldía plácida no cesan. Todo el mundo echa mano de la aritmética y de intentar encontrar la fórmula mágica que sume los 14 concejales necesarios para formar un equipo de gobierno con mayoría absoluta. Pero se olvidan de que ha llegado el momento de exigir a nuestros políticos que se olviden de los corsés ideológicos y se dediquen más a hacer política de verdad, pensando en bien común y en lo que verdaderamente interesa a sus ciudadanos.