Los accidentes con patinete lastran los resultados de Tarragona Ciutat 30

En el primer año desde que se limitó la velocidad se ha multado a 2.709 vehículos

15 septiembre 2021 05:30 | Actualizado a 15 septiembre 2021 05:33
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Ayer se cumplía el primer año de la entrada en funcionamiento de Tarragona Ciutat 30, o lo que es lo mismo, el cambio en la ordenanza municipal que prohíbe circular a más de 30 kilómetros por hora en la mayoría de las vías de la ciudad. Tarragona se adelantaba así a una medida que se hizo obligatoria en el conjunto de urbes del Estado en mayo de este año.

Si se juzga solo por los controles que realiza la Guàrdia Urbana, se puede decir que la mayoría de los conductores se ha adaptado a la medida. Desde octubre del año pasado hasta agosto de este año se han realizado controles de velocidad a 70.908 vehículos y de ellos se ha denunciado a 2.709 por superar los límites (708 por pasarse de los 30 Km/h y y 2001 por superar los 50 Km/h), lo que supone que solo un 3,8% incumplía la ordenanza. Es uno de los datos que daban a conocer ayer la concejal de Seguretat ciutadana, Cristina Guzmán, y el de movilidad, Xavier Puig.

Un 14% menos de accidentes

No obstante, insistía Puig, más que un cambio de normativa la intención es ir hacia un modelo de movilidad más pacífico, sostenible y seguro.

En este sentido, destacaba que uno de los principales objetivos, la bajada en la accidentalidad, se ha cumplido. Se basaba en la comparación de los accidentes que hubo entre enero y agosto del año 2019 con los que ha habido en el mismo periodo de este año. Se deja fuera el año 2020 por tratarse de un año atípico debido a las restricciones de movilidad que impuso la pandemia.

La comparación arroja que si en los primeros ocho meses de 2019 se produjeron 626 accidentes (de todo tipo, con daños materiales, heridos y muertos), en los mismos meses de 2021 han sido 536; un 14,37% menos.

No obstante, la otra meta que se había marcado el gobierno local en materia de seguridad, que consistía en bajar el número de atropellos, no se ha cumplido, sino que, por el contrario, ha aumentado. Se ha pasado de 36 personas atropelladas en los primeros meses de 2019 a 48 en 2021, lo que supone un crecimiento del 33%.

Aunque si se ve el detalle por meses se puede comprobar como en enero y febrero se redujo en 5 y 6 respectivamente el número de personas atropelladas, mientras que en marzo creció en 10. Se da la circunstancia de que ese mes comenzó a operar una tercera compañía de alquiler de patinetes eléctricos en la ciudad y se evidenció un auténtico despegue en su uso.

En lo que se refiere a las personas que sufrieron lesiones graves al ser atropelladas tampoco ha habido cambios notorios. Este año, hasta el 31 de julio, había 11 heridos graves, los mismos que en todo el año pasado. Son menos que los 13 que hubo en 2019 pero de este 2021 todavía faltan por contabilizar cinco meses.

Patinetes: falta pericia

Y es que otro de los grandes objetivos de la Ciutat 30 era pacificar el tránsito para favorecer la circulación de los Vehículos de Movilidad Personal (VMP) y bicicletas. De hecho, fue unos meses después de la puesta en marcha de la normativa, en enero de este año, cuando comenzaron a operar las empresas de alquiler en la ciudad.

En este sentido, Puig destaca que la llegada de estas empresas (obligadas a poner tantas plazas de aparcamiento como vehículos podían alquilar) ha permitido dotar a toda la ciudad de aparcabicis cuando antes el número era mínimo.

No obstante, la llegada masiva de estos vehículos también se ha traducido en que hay más accidentes en los que se ven involucrados. Si, por ejemplo, en 2019, cuando su uso era anecdótico, hubo 4 accidentes, en 2020 subieron a 14 y este año (hasta el 4 de septiembre) ya van 52.

En los accidentes de este año se han registrado 36 heridos leves y seis graves. Destaca, además, que en lo que va de año ha habido 6 atropellos de patinetes a peatones. Además, según la Guàrdia Urbana, un 78% de los accidentes han sido responsabilidad de los conductores de patinetes. «La entrada en funcionamiento de Ciutat 30, la llegada de empresas de alquiler de patinetes eléctricos y la campaña de Navidad del año pasado, en la cual los patinetes se convirtieron en uno de los regalos estrella, son algunos de los factores que explican este crecimiento», apuntaba Guzmán.

Añadía que «muchas veces a los conductores les falta pericia, puesto que no disponen de ninguna formación práctica previa, este hecho puede provocar caídas, salidas de vía o choques. Por esta razón, se han llevado a cabo una serie de acciones didácticas para mejorar el uso de este nuevo vehículo y se retomarán de nuevo este curso».

En lo que va de año se ha multado a 1.060 conductores de VMP, bicicletas, monopatines y otras. La mayoría de infracciones se han detectado en conductores de VMP (978) y en cambio solo 50 en bicicletas, 18 en monopatines y 5 en otros. La infracción mayoritaria ha sido el estacionamiento indebido o fuera de la zona señalizada por el VMP de alquiler (453), seguida de transportar pasajeros (165) o circular por la acera o áreas de peatones (152).

El casco será obligatorio

Puig explicó que la intención es que la ordenanza evolucione en función de las necesidades. De hecho, acaba de reunirse la Comissió d’Estudi de la Mobilitat y se decidieron algunas medidas como que el casco será obligatorio para ir en patinete, tanto si es de uso privado como de alquiler. Las medidas se llevarán al próximo pleno municipal que decidirá cuándo se pondrán en marcha.

También se rebaja la edad en que los niños pueden ir en patinete, bicicleta o juguetes por la acera de 15 a 12 años. En el caso de los patinetes eléctricos Puig señaló que «el Ayuntamiento será más taxativo a la hora de evitar que circulen por las aceras».

Entre los cambios figura también la reducción de velocidad a 30 en vías que permanecían a 40 como Via Augusta o Països Catalans. En esta última los patinetes deberán circular por el carril bici cuando esté listo.

Finalmente Puig aseguró que la Guàrdia Urbana multa a las empresas cuyos patinetes se aparcan fuera de lugar, algo que calificó de «inadmisible». También aseguró que las empresas están obligadas a controlar que sus usuarios sean mayores de 18 años. Explicó que si incumplen este requisito de manera reiterada «no podrán operar en la ciudad».

Comentarios
Multimedia Diari