Los barrios de TGN piden más seguridad y mejores conexiones con el centro

El 'Diari' analiza a fondo las demandas de los distintos distritos para los próximos cuatro años. La mayoría de ellas no son nuevas, lamentan

19 mayo 2017 22:05 | Actualizado a 22 mayo 2017 14:25
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Tras la sacudida electoral del 24-M en el conjunto de España, se abre un nuevo camino, en algunos casos inédito, donde la política de pactos se convertirá en el pan de cada día. Los portavoces vecinales y presidentes de las asociaciones de los barrios que conforman el municipio se hacen oír, de punta a punta, desde Bonavista hasta las zonas de Llevant. Todos ellos, en general, sienten esperanza de cara a una nueva etapa que parece mostrar los primeros síntomas de mejora económica, pero se muestran prudentes. Muchas de sus peticiones llevan años en los cajones del consistorio, como es el caso del Jaume I para la Part Alta o la problemática social en puntos concretos de ponent, pero sí es cierto que algunas demandas se han ido solventando poco a poco a lo largo de los últimos años. Si bien el consistorio tarraconense ha conseguido resistir, con Ballesteros a la cabeza, la irrupción de Ciutadans con cuatro escaños y el debut de ERC y la CUP podrían marcar sustancialmente un antes y un después en el día a día de la política municipal desde la Plaça de la Font. Así suena la voz de los barrios.

 

PONENT - Más políticas sociales

Por su parte Toni Peco, presidente de la Federació de Veïns de Tarragona y conocedor de primera mano de la zona de Ponent y los barrios del norte, pide más representación de los mismos en el nuevo ayuntamiento. «En el 24-M hubo una gran abstención en esas zonas. Preocupa el hecho de que no se sientan identificados y se vean abandonados», afirma Peco. Preguntado sobre la situación de Bonavista, Peco dice que el barrio tiene una falta de impulso comercial latente y alerta de la falta de planes concretos en caso de incidentes con las industrias colindantes. «Los accesos al barrio son otro de los puntos pendientes que hay que resolver. Parece que les interese mantener al barrio aislado», añade. Por lo que a Campclar se refiere, el reto social es aun ingente. «La mediación de conflictos, planes y ayudas sociales e integración son las bases en las que hay que seguir trabajando», dice.

Toni Peco lamenta que determinadas zonas de Torreforta no estén urbanizadas, especialmente las que rodean la riera que las separa de Riu Clar. Subraya la necesidad de llevar a cabo planes de desarrollo para varias familias de inmigrantes sin acceso a determinados recursos. Sobre los barrios de La Granja, L’Albada o La Floresta, Peco pide «mantenimiento». «Han luchado mucho para conseguir parques y otro tipo de equipamientos, pero los recortes han mermado la calidad de todos ello», añade. Todos estos barrios envuelven los terrenos del futuro complejo olímpico para los JJMM del 2017. La FAVT no considera el evento como una prioridad dado el contexto actual, pero sí esperan que sea una oportunidad para mejorar la imagen de Ponent y dinamizar la zona.

 

PART ALTA - La movilidad, el gran reto

Manel Rovira, presidente de la Associació de Veïns de la Part Alta, insiste en la necesidad de revisar la movilidad del casco antiguo. «Si bien es verdad que en los últimos 20 años ha habido una mejoría, no entendemos que el portal de Sant Antoni siga abierto para todo aquel que desee entrar, incluso si lleva un trailer». La voluntad de la asociación es que esta icónica puerta al casco antiguo restrinja el paso tal y como lo hace el portal del Roser. Añade que la Part Alta debe ser el «escaparate de Tarragona» para que los vecinos o turistas paseen en ella sin el estorbo de los vehículos. La vigilancia y la seguridad es otro de los temas que inquietan a muchos. Rovira defiende que, después de una serie de reuniones, hay más vigilancia por parte de los cuerpos policiales y que el índice de delincuencia del barrio no es ni mucho menos alto. Preguntado por el Jaume I, Rovira afirma haber mantenido conversaciones con el consistorio para buscar soluciones. Una de las que se barajan, idea del propio Rovira, sería la de trasladar la Casa de la Festa de la Via Augusta al enorme espacio sin ocupar. «El estado de los edificios y su conservación por parte de los dueños o el sufrido comercio son otras cosas que hay que mirar», concluye.

 

SANT SALVADOR - Resolver la incomunicación

Toni Peco describe dos «grandes problemas» que el barrio tiene actualmente. «Hay una brecha social muy marcada, muy desigual, entre las distintas partes del barrio. Luego está la desconexión con el centro de la ciudad», expone. Una de las ideas propuestas para coser mejor el barrio con el centro es el de crear carriles bici y aceras que permitan el desplazamiento a pie entre los dos lugares.

 

SANT PERE I SANT PAU - La 'brecha' de la autovía

Por su parte, Sant Pere i Sant Pau sale mejor parado en cuanto a transporte gracias, en parte, al campus de la URV. Pero la FAVT pide mejoras de conexión en Tarragona 2 y el centro, así como mejorar la seguridad de las pasarelas que cruzan sobre la autovía. Asimismo se piden nuevas políticas sociales para los sectores del barrio más desfavorecidos y que han sido más vulnerables a los efectos de la crisis.

 

PART BAIXA - Más medidas contra el incivismo y el abandono

Pepe Ruiz, presidente de la Federación Siglo XXI, pide ante todo seguridad ciudadana, limpieza y sanciones para los actos incívicos en la Part Baixa. «Se tratan de reivindicaciones históricas. Se va mejorando poco a poco, pero aun es insuficiente», comenta Ruiz. Esperan cambios durante los próximos cuatro años, sobretodo del resultado de la política de pactos que habrá que aplicar. «Falta dinamizar esta zona. Los jóvenes evitan instalarse aquí por la falta de servicios», concluye Ruiz, quien a pesar de todo, está muy orgulloso del barrio. Sigue pendiente la solución de la Façana Marítima, que tras décadas de debates sigue sin resolverse.

 

BOSCOS - Interrogantes en las obras

La Associació de Veïns de Boscos Nord denunció hace poco las complicaciones que han generado las obras destinadas a abastecer el suministro de agua a la cárcel de Mas d’Enric, que según la AV ha deteriorado aun más la comunicación con el centro. Asimismo, la seguridad y un transporte público más eficaz son otras de las demandas de la zona más oriental del municipio tarraconense.

 

ARRABASSADA - Una escuela que sigue sin llegar

La Escola Arrabassada sigue siendo el gran reto del barrio. L’Associació de Veïns de la Vall de L’Arrabassada se siente decepcionada por los constantes cambios e inconcreciones de las administraciones. «Nos han dicho que para el 2017. Sólo nos queda confiar en que así será», declara Josep Maria Bertran, presidente de la AV. Paralelamente, la limpieza de las calles y la seguridad son también temas por los que L’Arrabassada hará presión en los próximos cuatro años.

 

CENTRE - Por un entorno del Mercat más verde

 La principal preocupación de la Associació de Veïns de Tarragona Centre es la degradación y el abandono de la zona. «El envejecimiento de los vecinos, el deterioro de los edificios y la falta de equipamientos son algunos de los retos que tenemos por delante desde hace tiempo», afirma Núria Sabat, presidenta de la AV. El entorno del Mercat es otro rompecabezas. «Ya no solo por los años de obras, sino porque el proyecto contempla una ‘plaza dura’, sin apenas árboles, y precisamente muchas zonas verdes no tenemos», lamenta. Sabat es consciente de que el mercadillo necesita un espacio libre, pero ante todo, «buscamos un punto medio», concluye.

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