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La Associació de Veïns la Unió de Sant Pere i Sant Pau, que lidera la lucha para conseguir que se cree una ley que obligue a los bancos a prestar unos servicios mínimos presenciales y a que a atiendan a las todas aquellas personas mayores de 60 años en el interior de las oficinas bancarias, ha acudido ahora al Síndic de Greuges de Catalunya para que les apoye en la causa.
En una carta que han mandado al defensor del pueblo, recuerdan que varios voluntarios de la Unió y de la Associació de Veïns Sant Pere i Sant Pau se unieron para llevar a cabo unas patrullas vecinales cerca de los bancos para evitar, simplemente con su presencia, los robos a la gente mayor que iba a sacar dinero del cajero, y celebran que desde entonces no se ha producido ningún atraco. No obstante, comentan al Síndic que, por un lado, no pueden mantener estas patrullas para siempre y, por otro, que ni las entidades financieras han puesto medidas ni el Ayuntamiento de Tarragona ha cumplido con su demanda de disponer de policía fija en el barrio. Recuerdan en el escrito que en Sant Pere i Sant Pau hay 20.000 habitantes, que los bancos van reduciendo y suprimiendo servicios a diario, y que ninguna administración pública ha hecho nada para arreglar este problema, que existe en todo el país. Por ello, acaba la carta, «nos dirigimos al Síndic de Greuges para que se posicione a nuestro lado y que inste a los diferentes actores a poner solución, consiguiendo que se atienda a las personas mayores de 60 años en el interior de los bancos, así como también a las que se ven afectadas por la movilidad reducida o por cualquier otro impedimento».
Sin la AVV Sant Pere i Sant Pau
Todo esto llega unos días después de que la AVV Sant Pere i Sant Pau anunciara que abandona la lucha para conseguir estas mejoras en el servicio de los bancos. Por un lado, por discrepancias con la AVV la Unió y, por otro, en vistas de que nadie ha hecho caso a las demandas del barrio.
