Los despidos por ERE se disparan un 50% en Tarragona

Los afectados por expedientes de regulación de empleo aumentan en la provincia por primera vez desde 2012. En los nueve primeros meses de 2019 ya superan con creces los de todo 2018

10 diciembre 2019 19:53 | Actualizado a 11 diciembre 2019 08:58
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Para algunos es un síntoma de cierta inestabilidad, incluso tambores de un frenazo económico que ya se nota en aspectos como el empleo. Con grados variables de alarmismo, lo cierto es que los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) rebrotan con contundencia en la provincia en este 2019. El número de despidos colectivos crece en Tarragona por primera vez desde 2012. Este año han aumentado más de un 50%: entre enero y septiembre suman 424 trabajadores afectados, superando con creces a los 280 casos cosechados durante todo 2018. 

La inercia atañe a toda Catalunya y no es nueva de este final del año, sino que viene detectándose ya a lo largo de este 2019. Bien es verdad que las cifras actuales aún distan mucho de lo registrado en los momentos más duros de la crisis, con topes anuales de hasta 5.500 afectados por ERES en las  comarcas tarraconenses. 

«Hay desaceleración económica y un temor de la empresa a una involución de la reforma laboral», dice el economista Juan Gallardo

Pero ese punto de inflexión, marcado por el alza, constituye un indicador cuanto menos inquietante para algunos. De esos 424 empleados, 228 forman parte de despidos colectivos, 165 de suspensiones de contrato y 31 de reducción de jornada, según las últimas estadísticas del Ministerio de Trabajo, Migración y Seguridad Social. En Catalunya, los afectados han ascendido a 7.083 personas. En el mismo periodo del año pasado fueron 1.945 personas menos. En España, ha habido en nueve meses 54.201 despidos por ERE, 13.185 más que en el mismo plazo de 2018, lo que supone un 32,1% más. 

Del CF Reus a Abertis
Cifras, todas ellas, que muestran cuanto menos cierta zozobra e incertidumbre. En la provincia hay algunos casos representativos y bien conocidos. Uno de ellos es el del CF Reus. En verano, los empleados del club rojinegro aceptaron el expediente que les propuso el administrador concursal, después de una espiral de despropósitos que acabó con el primer equipo desapareciendo de la competición y la entidad, aún, en peligro de liquidación. Resultaron afectados 63 trabajadores. 

Otro frente abierto es el de Abertis, que aplicará un ERE para 136 trabajadores de las dos autopistas que el día 31 acaban su contrato de concesión. Una de ellas es el tramo de la AP-7 entre Tarragona y Alicante. El ERE del grupo de supermercados DIA afectó a cuatro trabajadores de Torredembarra, al tiempo en que el sector bancario también sigue con su reestructuración, afectando a empleados en la provincia. 

Algunos analistas económicos desglosan la situación. «Estamos en una época de debilidad, en la que las empresas se mantienen porque van haciendo equilibrios, pero en cuanto alguien fuerza un poco, se cae el castillo de naipes», explica el economista de la Cepta Rafael Muñoz, que arroja diversas claves de esta coyuntura: «Para salir de la crisis se necesitaba cierta precariedad, porque de alguna forma estás dopando el motor, poniendo el starter, por hacer un símil, pero no puedes ir siempre con el starter puesto, rebajando salarios». De ahí el círculo vicioso: «Hemos cronificado la precariedad. Puede haber más beneficios, pero digamos que no metes dinero en la rueda. La gente no gasta y no se mueve la economía». 

«Son ERE preventivos de empresas ante la crisis que puede llegar en 2021 o 2022», indica Víctor Canalda, abogado en Tarragona y profesor de Derecho en la UOC

Para el economista tarraconense Juan Gallardo influyen dos inputs decisivos en esta ecuación laboral: « Se está dando una ralentización económica. No hemos entrado en recesión, ni mucho menos, pero estamos creciendo menos y eso se está notando». El otro factor, según Gallardo, tiene que ver con la circunstancia política. «Hay un temor a una involución de la reforma laboral que puede hacer que las condiciones del despido se endurezcan. Por el nuevo gobierno que se puede formar, hay empresas que prevén que pueda pasar eso y están adelantando decisiones», argumenta el economista del gabinete de estudios de la patronal Cepta. 

Hostelería e industria
Durante el año pasado, hubo ERE en 38 empresas tarraconenses, según la estadística del Ministerio. De los 280 despedidos, 276 fueron con acuerdo y los cuatro restantes sin él. Hubo más hombres (158) que mujeres (122) afectados. La hostelería y la industria manufacturera lideraron esos expedientes, con 63 empleados afectados por cada sector.  

Los diferentes agentes económicos están alertando de estos incrementos. Así, ante la deriva de este 2019, Pimec considera importante la aprobación de los presupuestos de la Generalitat para «poder impulsar las políticas industriales necesarias fijadas a través del Pacte Nacional per a la Indústria». Pimec detecta otros factores de «una situación que se reitera desde hace unos meses», y que tiene en parte sus motivos en la citada ralentización del crecimiento económico, la moderación en los ritmos de creación de ocupación y reducción del paro. 

Asimimo, la patronal de la pequeña y mediana empresa en Catalunya sitúa el epicentro «en la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la incertidumbre derivada del Brexit y la ralentización del crecimiento alemán». 

Pimec alerta de la dinámica y dice que influye el Brexit o la guerra de EEUU y China

Por su parte, Víctor Canalda, abogado laboralista tarraconense y profesor de Derecho Laboral en la UOC, desgrana su teoría: «Las causas no son propiamente las económicas de una recesión. Son ERE preventivos, de empresas que quieren tener ubicarse en una posición estratégica, de cara al futuro, a 2021 o 2020, cuando los expertos consideran que vendrá otra crisis fuerte, quizás no tanto como la que sufrimos entre los años 2007 y 2012, pero sí una especie de segunda oleada». 

Canalda cree que actualmente «las empresas con mayor cintura, con algún excedente», despiden «por obtener una posición ventajosa», con la intención de «aligerar la plantilla, en el entendido de que es una parte importante de los costes». Este experto en el mundo laboral cree que «si las multinacionales se mueven, los demás van a rebufo». Hay otra variable que se ubica tras la problemática: «Sobre todo en los servicios, pero también en la industria, hay empresas que con la instalación de los bots se están automatizando. Por eso aprovechan para aligerar plantillas». 

Comentarios
Multimedia Diari