Los negocios del Port

Grandes empresas, en su mayoría de carácter nacional, muy especializadas, poco dadas al protagonismo y a implicarse en la ciudad. Así es el perfil mayoritario de las compañías que operan en el Port de Tarragona, sin duda uno de los principales agentes económicos del territorio pero a la vez un ámbito muy desconocido para la mayor parte de los tarraconenses que, más allá de la presencia de barcos en el skyline de la ciudad y de la existencia de grandes grúas e incluso silos en terrenos portuarios, poco saben de la operativa y recursos que hay detrás de la carga y descarga de buques. 

Hagan la prueba. Pregunten en su entorno cuántos operadores portuarios con actividad en Tarragona conocen y si saben algo más de ellos. Seguramente los que citen más de cinco podrán contarse con los dedos de las manos. 

Las razones de ese desconocimiento son múltiples. Por un lado, dónde se desarrolla la propia actividad: los muelles, accesibles únicamente para los operadores del sector. Por otro lado, el elevado nivel de especialización de las empresas. Solo unos pocos saben a qué se dedican los diferentes profesionales de este ámbito: estibadores, consignatarios, transitarios, agentes de aduanas, etćetera. 

Cambio de perfil
Pocas compañías locales
Además, como en otros sectores económicos, la tipología de las empresas portuarias ha cambiado notablemente en los últimos años. Hoy son muy pocas las compañías locales y de capital familiar, ha habido numerosas fusiones y/o adquisiciones en el sector y han llegado al Port de Tarragona algunos de los grandes operadores nacionales e internacionales, entre ellos Ership, Bergé, Euroports, DP World o Noatum. 

Esa idiosincrasia explica en parte porqué en su mayoría las empresas portuarias quieren pasar desapercibidas y están poco involucradas en la ciudad. Evidentemente entre 264 compañías que operan en el Port prácticamente a diario, hay excepciones pero, a diferencia de las firmas de otros sectores, como el químico con el que en muchos casos tienen estrecha relación, es difícil encontrarlas en actos de la ciudad.

Ni siquiera juntas, con la excepción de alguna feria del sector o los premios anuales de la Agrupación para la Promoción del Port de Tarragona (Apportt), que este mes de diciembre han llegado a su décimosexta edición y son punto de encuentro de la comunidad portuaria. 

El contraste
La apuesta del Port por abrirse a la ciudad
Esta baja imbrincación con la sociedad tarraconense contrasta con la estrategia de los últimos años  de la Autoritat Portuària de Tarragona (APT) de abrirse a la ciudad tanto invirtiendo en los antiguos tinglados, el Serrallo, el paseo de l’Escullera, la pasarela que une la Baixada del Toro con la playa del Miracle o el paseo marítimo como organizando e involucrándose en numerosas iniciativas de Tarragona y su hinterland o área de influencia. 

Carlos Arola, presidente de Apportt, reconoce que la actividad portuaria es poco conocida por la mayoría de las personas que no están relacionadas con el puerto y coincide en algunos de los factores. Entre ellos, «la lógica limitación de acceso al recinto portuario». 

Círculo cerrado
Clientes muy identificados
Otro factor que, según él incide en este aspecto es que las empresas del ámbito portuario «operan en un círculo relativamente cerrado, bastante endogámico, con los clientes muy identificados y sin necesidad de publicitarse». Eso y el hecho de que algunas empresas no tengan su sede central en Tarragona o que como opción estratégica hayan decidido mantener su actividad limitada únicamente al ámbito portuario.  

El presidente de Apportt ha podido comprobar recientemente ese desconocimiento durante el Simposio Internacional de Logística celebrado el  1 de diciembre en la Cambra de Comerç de Tarragona. El encuentro con cerca de un centenar de inscritos (entre ellos, directivos de numerosas empresas del territorio, algunas de ellas incluso usuarias del Port de Tarragona), finalizó con una visita al puerto y según Arola, muchos de los participantes reconocieron que apenas sabían nada de este ámbito y que se habían quedado sorprendidos.

Pese a ello, el representante de Apportt asegura que «especialmente en los últimos años, cada vez más empresas del ámbito portuario se han ido involucrando en la sociedad tarraconense, participando e intentando aportar sus experiencias en los distintos ámbitos empresariales, universitarios o de la sociedad en general».