Los partidos, a la caza de 164.000 indecisos en la provincia

Tarragona es la provincia más incierta. Un 29% no tiene decidido el voto. Es la cifra más alta y por eso ‘baila’ un escaño, según el CIS. La duda es entre partidos, no entre los dos bloques enfrentados por el Procés

09 diciembre 2017 22:08 | Actualizado a 09 diciembre 2017 22:55
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Buena parte de la ciudadanía de Tarragona está sumida en la duda. Es la provincia catalana con más indecisos de cara al 21-D. A pesar de la polarización de estas elecciones y de que se presume una altísima movilización, también en las comarcas tarraconenses hay grandes bolsas de electores que aún no tienen decidido el voto para unas elecciones que se presumen tan trascendentales. 

Así lo describe la encuesta preelectoral del CIS publicada esta semana. Según ese barómetro, el 29% del electorado tarraconense no sabe qué votar. Es un porcentaje más elevado que la media catalana (25,3%) pero también que el resto de las provincias: Barcelona (24,9%), Girona (24,2%) y Lleida (25,8%), con hasta cinco puntos de diferencia. 

De ahí se extrae que, en cifras estimadas, 164.000 ciudadanos pueden ser catalogados demoscópicamente como indecisos y, por lo tanto, ser target apetecible pero a la vez muy difícil de abordar para los partidos en esta recta final. 

Ni mucho menos se trata de un colectivo homogéneo, de entrada por la misma tipología de preguntas que hace el CIS: el 17,4% respondió que ‘no sabe’ a quién votar y el 11,6% que ‘no contesta’.  

En la movilización de esas capas de la población puede residir la clave, aunque hay que tener en cuenta una salvedad: es extraño que sean indecisos que se debatan entre votar al bloque soberanista o al constitucionalista. Por lo tanto, es de prever que se trate de personas que dudan entre una fuerza y otra dentro del mismo grupo. «Estamos en porcentajes de indecisión muy importantes. Puede ser que la mayor parte de indecisos, si al final van a votar, se decanten por el lado constitucionalista, ya que hay que tener en cuenta que el soberanismo, desde hace tiempo, está muy movilizado, pero es sólo una hipótesis. Hablamos de personas, por ejemplo, que están dudando entre el PSC y Ciutadans», cuenta el sociólogo y profesor de la URV Àngel Belzunegui, que detecta, eso sí, otra posible diatriba dentro del bloque independentista: «Puede haber una parte del electorado que no tenga claro si votar a ERC o a Junts per Catalunya. Hemos visto en las últimas semanas cómo ERC va perdiendo terreno en las encuestas y lo va recuperando la candidatura de Puigdemont, a quien le está saliendo bien la estrategia de irse a Bruselas y hacer campaña desde allí». 

Ismael Peña-López, profesor de Ciencia Política en la UOC, destaca también el alto número de indecisos, y lo adjudica a las dudas entre partidos: «No hablamos de bloques, sino de fuerzas, quizás de un sufragio más obrero que quiere ir a votar, que siempre había dado apoyo al PSC y después dejó de dárselo. Ahora duda si volver a votar a los socialistas». Muchos más claros están los apoyos a formaciones más polarizadas como la CUP o el PP. 

Escaños en disputa
Todas esas cavilaciones, que podrían alargarse hasta momentos antes de depositar el voto en la urna, hacen de Tarragona la provincia más incierta, y el CIS arroja otro indicador para demostrarlo: es la única circunscripción de las cuatro en las que baila un diputado. «Evidentemente, esos porcentajes de indecisión tienen mucho que ver a la hora de mantener los escaños flotando entre dos partidos, como pasa en Tarragona», apunta Àngel Belzunegui. 

Según ese balance preelectoral, hay un diputado que oscila entre Ciutadans y Junts per Catalunya y que podría tener la llave del resultado final. No hay que obviar tampoco la presencia del voto oculto, históricamente asignable a partidos como el PP o Ciutadans. También hay que tener en cuenta el perfil mayoritario que puede encajar dentro de la definición de indeciso: en general son jóvenes que tienen poco consolidado su voto y mujeres, menos reacias a responder ‘no lo sé’ o no contestar en un sondeo. 

Este rol de la provincia en las encuestas no es nuevo. Tarragona suele destacar en los barómetros previos a las elecciones como una zona con alto índice de indecisión. Ya ocurrió con las últimas elecciones generales. Los expertos creen que buena parte de ese 29% indeciso se acabará movilizando.

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