Los samuráis de Sinhus Sport y las Mekatililis de Som i Serem se llevan el reinado de Tarragona

Los samuráis de Sinhus Sport fueron los grandes triunfadores de la noche de ayer. La comparsa quedó en primera posición, lo que significa que el año que viene reinará la ciudad durante el Carnaval. La segunda posición fue para las Mekatililis de la comparsa Som i Serem & Urban Style, que serán los encargados de llevar la Concubina. Los nervios estaban a flor de piel en la Plaça de la Font. Y es que son muchos los meses que las comparsas llevan trabajando par dar lo mejor de ellas. Pero solamente dos fueron las ganadoras. 

El alma mater de la entidad Sinhus Sport es Paco Fiori. Ayer, después de recoger el premio, Fiori aseguraba que llevaba mucho tiempo con ganas de defender esta temática. Cabe tener en cuenta que la comparsa nace a partir de un gimnasio, especializado en karate, en Torreforta. Este año salieron un total de 150 personas, con diez trajes diferentes, diseñados por Ana Belén Romero, Marc Bermúdez y Rosa Bermúdez.

 

Somos mucha gente, y nuestra intención era sorprender durante todo el rato de la rua. Que la gente no se aburriera ni lo encontrara monótono. Creo que lo hemos conseguido», aseguraba ayer Paco Fiori. Los gorros de los samuráis fue, seguramente, lo que más sorprendió a los tarraconenses. Estaban hechos de caucho y de metacrilato brillante. «Todo ha salido perfecto, nada ha fallado, ni las luces, ni el sonido, ni las carrozas», explicaba Fiori. 

El segundo puesto del podium fue para las Mekatililis de la comparsa Som i Serem & Urban Style, del barrio del Pilar. El jurado valoró la temática reivindicativa de la entidad. Se inspiraron en Mekatilili, la mujer africana que encabezó el enfrentamiento de su pueblo contra la opresión británica, durante la Primera Guerra Mundial. Simboliza la lucha por los derechos de las mujeres. Cabe recordar que Som i Serem & Urban Style también ganaron la Disfressa d’Or, que tuvo lugar hace dos domingos.

El adiós con fuego
Pero antes de la entrega de los premios fue el turno de la despedida del rey Carnestoltes. A primera hora de la mañana, la Mascarada del Dol paseó por la ciudad entre lloros y tristeza. La comitiva visitó el despacho del alcalde Ballesteros, quien les invitó a desayunar para ahogar las penas. Por la tarde, los tarraconenses pudieron despedirse de los reyes en la casa mortuoria, este año ubicada en el Antic Ajuntament. 

No fue hasta las diez de la noche, cuando Llucifer leyó el testamento real en una Plaça de la Font llena. Los presuntos abusos por parte de la iglesia tarraconense protagonizaron el discurso. No se perdió la oportunidad para tratar algunos de los temas de actualidad de la ciudad, como la falta de local de ensayo de los Xiquets de Tarragona, los Juegos Mediterráneos, las próximas elecciones municipales y generales y el juicio contra el Procés. Finalmente fue el turno del entierro del rey Carnestoltes, con la Crema del Ninot, la Ninota y la Bota. Los protagonistas del adiós al Carnaval fueron, como cada año, los grupos de fuego de la ciudad, como el Ball de Diables, la Colla de Diables Voramar del Serrallo, la Víbria, el Bou, el Drac y el Griu. Se acabó así uno de los mejores Carnavales del Estado.