Los usuarios de residencias tendrán más 'dinero de bolsillo' desde marzo

Las personas con discapacidad que viven en una residencia comenzarán a percibir a partir del 1 de marzo más «dinero de bolsillo»: ésa es la fecha a partir de la cual el Govern aplicará los nuevos criterios de copago, según los cuales los discapacitados no deberán destinar tanta proporción de sus ingresos a costear el servicio asistencial como hasta ahora. La medida ha sido largamente reivindicada por los usuarios, y fueron especialmente insistentes en ello los de la residencia de Sant Salvador, de Tarragona.

Lamentaban que, desde que se les había aumentado la cantidad correspondiente al copago en diciembre de 2015, el dinero que les quedaba no alcanzaba para cubrir sus necesidades personales básicas. La reivindicación surtió efecto y en mayo de 2016 la Generalitat llegó a un acuerdo con las principales federaciones del sector (Dincat –personas con discapacidad intelectual–, ECOM –personas con discapacidad física– y FEPCCAT –personas con parálisis cerebral–), durante una reunión en la que se constituyó el Consell de la Discapacitat de Catalunya. En ella, se firmó un acuerdo que fijaba unos nuevos baremos de copago. En concreto, se redefinieron las cantidades mínima que, en cualquier caso, deben quedar garantizadas para gastos personales del usuario y que, en consecuencia, están excluidas del copago. Esos acuerdos se hicieron efectivos finalmente en una orden del Departament de Treball y Afers Socials publicada en noviembre en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC) y comenzarán a aplicarse a partir del 1 de marzo. Además, tendrá efectos retroactivos con fecha 1 de enero de 2016: lo que se les haya cobrado de más a los usuarios en este tiempo les será devuelto.

En algún caso, más del doble

Dicho mínimo garantizado se calcula a partir del «indicador de renda de suficiència de Catalunya» (IRSC). Hasta ahora, por ejemplo, el mínimo garantizado para los usuarios de residencias de personas con discapacidad física era un 30% del IRSC(es decir:199,19 euros mensuales). Ahora, en cambio, dicho mínimo queda establecido en un 60% del mismo indicador, es decir:398,39 euros, el doble.

Otro ejemplo:los usuarios de residencias para personas con discapacidad intelectual con apoyo generalizado, a quienes ahora se les reservaba como mínimo garantizado un 20% del IRSC(132,79 euros), se les aumenta hasta el 50%(331,99 euros). Más del doble.

Conviene subrayar que ese «dinero de bolsillo» es para todos los gastos personales del discapacitado, más allá de lo incluido en el copago de la residencia (techo, comida y cuidados). De ese ‘dinero de bolsillo’ tienen que salir, pues, gastos que no son un capricho:medicamentos, muchos de los cuales no entran por la Seguridad Social, el dentista, las gafas, el podólogo, pilas para los audífonos o los repuestos de las sillas de ruedas. A ello hay que sumar los gastos de cualquier persona: vestuario, productos de higiene, teléfono, transporte, ocio...

Reunión en Barcelona

Este mismo miércoles, en una reunión del Consell de la Discapacitat que tendrá lugar en Barcelona, está previsto que la consellera, Dolors Bassa, explique de primera mano a los afectados cómo va a funcionar el nuevo sistema y cómo se va a proceder a la devolución de las cantidades cobradas de más desde el 1 de enero de 2016.

La medida supondrá para el Departament de Treball un importe de 8 millones de euros. «Estamos trabajando para revertir los recortes causados por la crisis y poner todos los esfuerzos en invertir para las personas», valora al respecto el delegat del Govern en Tarragona, Òscar Peris.