Marta Martínez: 'Es prehistórico tener un único currículum para todo'

- Lo primero: ¿de verdad hay empleo este verano?

- Sí, los datos dicen que unas 400.000 personas encuentran empleo en verano en el Estado, especialmente en zonas turísticas como la nuestra... En el caso de los jóvenes es importante para que desarrollen habilidades, descubran lo que les puede interesar y comiencen a conocer el funcionamiento del mercado laboral.

- Dejando de lado lo económico, ¿merece la pena buscar un empleo de verano ‘de lo que sea’ aunque no tenga nada que ver con lo que el joven está estudiando?

- Esto ya es un tema más delicado. Una de las primeras cosas que tenemos que hacer cuando buscamos empleo es definir nuestro objetivo profesional. No hacerlo es uno de los primeros errores que se comete. Si enviamos 100 curriculums, tenemos menos posibilidades de encontrar trabajo que si repartimos dos o tres en los sitios concretos. Es algo, además, que debe estar en consonancia con nuestras aptitudes e intereses.

- ¿En qué hay trabajo en verano?

- Hoteles, campings, bares, parques temáticos, comercio, trabajo forestal y agrícola... Y también una parte de servicios personales como canguros, clases de repaso, servicios domésticos... La mayoría se ofrece a través de empresas de trabajo temporal.

- También hablan de la oferta en Europa. ¿Qué hay?

- Básicamente de au pair y trabajo agrícola, lo más conocido es la vendimia, en Francia. Además, aunque no es remunerado también está el sistema de voluntariado europeo que permite practicar idiomas y adquirir habilidades transversales. Además explicamos el programa wwoof que te permite tener cama y comida a cambio de realizar un trabajo específico, como una labor de jardinería o una reparación en una casa.

- ¿Y cómo se llega a estas ofertas?

- Es muy importante la red de contactos, mucha gente lo relaciona con los ‘enchufes’, pero no hay que confundirse. El 70% de las ofertas de trabajo no sale a la luz. Es un iceberg de ofertas que no se ven, que no salen en internet ni en prensa.

- ¿Qué papel juegan las redes sociales?

- Las redes sociales pueden ser útiles para buscar trabajo, también para que tus contactos sepan qué estás buscando. Lo que pasa es que a la gente joven se le tiene que explicar la diferencia entre un perfil personal y un perfil profesional. Si en nuestro Facebook colgamos las fiestas de fin de semana será más difícil que nos contacten. Lo mejor sería tener nuestro perfil personal cerrado y plantearnos un perfil de Facebook o twitter más profesional.

- Habla de habilidades transversales. ¿A qué se refiere?

- Ahora mismo alguien que está buscando una persona para trabajar en una empresa se puede encontrar con 800 currículum sobre la mesa de gente con las mismas competencias técnicas y una experiencia laboral similar. Lo que nos hace destacar entre estos 800 son las habilidades transversales: creatividad, iniciativa, actitud emprendedora, capacidades de trabajo en equipo... El problema es que todo el mundo coloca lo mismo en el currículum y eso no sirve de nada. Deberíamos tener un currículum para cada oferta, es prehistórico tener un solo currículum y enviarlo a todas.

-Es decir, recordar que buscar trabajo da trabajo.

- Sí, mucha gente viene al final de junio diciendo que ha acabado las clases y ahora quiere encontrar un trabajo; pues lo tienen muy difícil. Si uno busca trabajo de verano debería estar buscando ya. Y no se trata de echar unos curriculums, sino de acudir a las empresas de trabajo temporal, bolsas de trabajo en internet, red de contactos, autocandidatura... Hay que utilizar todos los canales disponibles.