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El número de personas que paga de forma fraccionada todos los tributos municipales se ha incrementado en más de un 13% respecto al año pasado. Así lo ponen de manifiesto los datos que maneja el Ayuntamiento de Tarragona -a los que ha tenido acceso el Diari-, que indican que un total de 8.705 contribuyentes sufragan este 2017 sus obligaciones económicas con el Consistorio a lo largo de todo el año.
Esta cifra es significativamente superior a los 7.730 ciudadanos que abonaron los pagos de forma forma prorrogada a lo largo de 2016. Los ciudadanos que pagan -entre otro- impuestos como el IBI, el AIE, el de vehículos o la tasa de la basura de forma fraccionada pagan el tributo mediante diez recibos, que se ejecutan entre los meses de marzo y diciembre si la solicitud se presentó en enero. Asimismo, este lunes finalizaba el plazo para solicitar el fraccionamiento en seis plazos. Los ciudadanos que presentaron la instancia entre el 31 de enero y el 5 de junio podrán hacer frente a los impuestos en seis pagos, que se extenderán entre los meses de julio y diciembre y en 2018 ya se les cobrará automáticamente en diez recibos (entre marzo y diciembre).
Cabe destacar que, en sólo cinco años, el número de personas que fracciona el pago de los impuestos se ha doblado en la ciudad. Así, se ha pasado de los 3.998 ciudadanos que fraccionaron sus pagos en 2011 a los 8.705 que lo hacen este año.
Un 20% más lo paga todo en febrero
De forma paralela, el volumen de contribuyentes que ha pagado de forma avanzada en febrero todos los tributos municipales se ha incrementado en casi un 20% respecto al año pasado. En total, son 1.384 los contribuyentes sufragaron sus obligaciones económicas anuales con la corporación local antes del pasado 29 de febrero.
Esta cifra es significativamente superior a los 1.153 ciudadanos que abonaron los pagos de forma anticipada durante el ejercicio 2016. Cabe destacar que los ciudadanos que han optado por cumplir de forma avanzada con el Consistorio tienen una rebaja del 2,5% en la cantidad que aportan a la administración municipal.
Cabe destacar que, en tres años, la opción de pagar en febrero todas las obligaciones con la corporación local ha aumentado en un 54,2%, pasando de los 897 contribuyentes que lo hicieron en 2014 a los 1.384 que lo han hecho este año.
De media, el recibo que se paga en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) en la ciudad es ligeramente superior a los 600 euros, mientras que en la tasa de la basura la factura es de unos cien euros y en el Impuesto de Vehículos unos 90. Todos estos recibos se han visto encarecidos de manera importante a lo largo de los últimos años. El IBI ha subido un 25%, mientras que la tasa de la basura se ha incrementado en un 46% desde 2008.
'Queda mucho aún por hacer'
El concejal de Hisenda, Pau Pérez (PSC), reconoce que la administración municipal está «muy satisfecha» con la respuesta de los ciudadanos, si bien remarca que esta forma de pago «aún tiene mucho camino por recorrer». «Debemos llevar a cabo alguna medida para llegar a más gente. Y no sólo en el pago avanzado, sino también en el fraccionado» remarcó el máximo responsable económico del Consistorio.
A lo largo de 2016, el número de personas que solicitaron una ayuda económica para hacer frente al pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) bajó casi un 19%, ya que e pasó de las 75 ayudas de 2015 a las 61 del año pasado. En total, el Ayuntamiento pasó de pagar unos 7.500 euros a abonar 6.100. De forma paralela, Serveis Socials destinó el año pasado un total de 83.293 euros a prestaciones para poder hacer efectivo el pago de los gastos básicos del hogar. En total, el número de personas que recibieron estas ayudas fueron 951, una cifra muy similar a las 964 ayudas que se ejecutaron en 2015.
Pese a la satisfacción mostrada por parte del gobierno, la medida de rebajar impuestos no está bien vista por parte del presidente de la Federació d’Associacions de Veïns de Tarragona (FAVT), Antoni Peco. «No es justo que se rebaje la cantidad a pagar a los que puedan abonar todos los tributos a la vez, ya que se está beneficiando a los que más dinero tienen, cuando lo lógico sería ayudar a los que sufren más problemas económicos» afirma el representante vecinal.
Según Peco, el pago de las tasas y tributos «debería ser progresiva, en función de la renta que tenga cada familia. Las boninificaciones actuales no son suficientes», afirma.
