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El presidente de la Audiencia de Tarragona, Javier Hernández, tachó de «agravio» y de situación «inaceptable» que el Govern no prevea construir el nuevo Fòrum Judicial en los próximos años y que la ciudad continúe como «la única capital catalana «sin un nuevo equipamiento de estas características. Durante muchos años han adoptado una posición de colaboración, de compromiso y de confianza en la planificación del Departament de Justícia, pero que la falta de planificación hace que identifiquen «una situación de agravio hacia en Tarragona».
Contrapuso la situación con los «dos equipamientos nuevos en un periodo de 30 años» en Girona, con la Ciutat de la Justícia de Barcelona y con las infraestructuras «potentes y muy adecuadas» de que dispone Lleida. Según el magistrado, en Tarragona la situación «empieza a ser inaceptable».
Javier Hernández explicó que los problemas de espacio en los juzgados penales incluso impiden activar algunos mecanismos de mejora como un nuevo servicio de ejecución, y que el edificio de la Audiencia tendría «un grave problema» si tuviera incorporar una nueva unidad judicial. «La situación es muy preocupante y empieza a ser de difícil comprensión», insistió. Recordó que la razón que esgrime el Govern es presupuestaria, pero defendió que la política consiste en identificar prioridades y que el proyecto de Tarragona es una «de evidente».
Por el contrario, el presidente del máximo órgano provincial avanzó que, según las previsiones del Departament de Justicia, el nuevo edificio judicial de Tortosa inaugurará en septiembre. El inmueble, que ha supuesto una inversión de 5,3 millones de euros, tendrá 3.500 metros cuadrados y permitirá concentrar alrededor de la plaza Dels Estudis toda la actividad judicial de la capital del Baix Ebre.
Un octavo juzgado
Por su parte, el presidente del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJCat), Jesús María Barrientos, hizo un repaso a la situación de los órganos judiciales de la demarcación y recordó que «los puntos más problemáticos» siguen estando en el partido judicial de Reus y, en menor medida, en El Vendrell. Recordó que el año pasado se puso en marcha en Reus el Juzgado de Primera Instancia número 7, con competencias exclusivas de temas de familia, el cual ha permitido «aliviar» la carga de trabajo del resto de órganos.
No obstante, señaló que sigue pendiente el octavo juzgado de instancia de Reus, que también podría asumir competencias de familia, incapacidades e internamientos, y que permitiría que la jurisdicción civil en el partido judicial quedara «bien atendida en términos razonables».
La Sala de Govern del TSJC, que se reunió ayer en la Audiencia de Tarragona, se comprometido a «redistribuir las competencias» entre el Juzgado Social de Reus y el de Tortosa, por lo que el primero transfiera algunas causas del ámbito laboral al de la capital del Baix Ebre, dado que tiene una carga de trabajo «muy inferior».
Oficina judicial de El Vendrell
Por otra parte, el presidente del TSJCat explicó que la nueva oficina judicial de El Vendrell, implementada hace cerca de cuatro años, dispone desde febrero de un plan de refuerzo del servicio común de ejecución, que solía acumular retrasos. Un nuevo equipo de actuación previa colabora en la gestión de los escritos y de las 15.000 ejecutorias que están pendientes de tramitación en el conjunto del partido judicial.
Barrientos explicó que el Juzgado de Primera Instancia número 8 de Tarragona, con competencia provincial de los asuntos derivados de las cláusulas abusivas en contratos hipotecarios, dispone de un refuerzo con un juez de adscripción territorial y que la oficina también se ha reforzado para colaborar en la tramitación de demandas. No obstante, reconoció que ni la dimensión judicial ni de la oficina son «suficiente para dar una respuesta en tiempo a este tipo de procedimientos». Asimismo, alertó de que el volumen de litigios se trasladará pronto a la Sección Primera de la Audiencia de Tarragona que, de forma casi sistemática, las sentencias suelen recurrir en apelación.
