Se desata la guerra política por los Juegos del Mediterráneo de 2017. A raíz de la segunda renuncia empresarial para construir el Palau d’Esports de Campclar –Dragos y Copisa–, los partidos constitucionalistas del Ayuntamiento de Tarragona –PSC, PP, Unió y C’s– acusan a Junts pel Sí (CDCy ERC) de «torpedear y poner palos a las ruedas» al evento.
Así se expresó en declaraciones a este periódico el concejal del 2017, Javier Villamayor (PSC). quien en la edición del pasado jueves pidió a CDC y ERC que «dejen de torpedear el proyecto». Más concretamente, recordó a los grupos independentistas que «sus partidos apoyaron de forma unánime el evento en el Parlament», por lo que les invitó a «trabajar de manera conjunta» con el equipo de gobierno.