Palabras contra la militarización en el Port de Tarragona

La Coordinadora Paraules per la Pau se manifiesta ante el portaaviones Juan Carlos I 

02 julio 2018 09:06 | Actualizado a 11 octubre 2018 12:17
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Protestar enérgicamente contra la militarización creciente y la cultura de las armas. Este es el objetivo que perseguía una nueva edición de la concentración Paraules per la Pau, que ayer domingo se celebró antes les Escales Reials del Port de Tarragona y que reunió a cerca de medio centenar de personas.

Esta nueva cita, organizada por la Coordinadora Paraules per la Pau, quiso poner su atención en la militarización creciente que, a su parecer, se ha hecho evidente en Tarragona durante las últimas semanas, alimentada por eventos de gran calado como los Juegos Mediterráneos.

Para condenar esta situación, los manifestantes leyeron un manifiesto elaborado por la coordinadora, extendieron banderas y se desplazaron hasta el buque Juan Carlos I, que durante este fin de semana ha estado varado en las instalaciones portuarias, donde ha sido visitante por ciudadanos que, ayer domingo, hacían cola para visitar sus instalaciones. 

«Esta vez nos ha parecido que era imprescindible convocar una nueva edición del Paraules per la Pau en la zona del Port», apuntaba Amadeu López, uno de los miembros de la Coordinadora, minutos antes de empezar el acto reivindicativo, mientras reiteraba que la cita tenía como objetivo «abrir un espacio a la paz ante la cultura creciente de la militarización que sufrimos como sociedad». 

Contra la seguridad marcial

En este contexto, la Coordinadora Tarragona Patrimoni de la Pau destaca que la organización de los Juegos Mediterráneos ha sido un catalizador de manifestaciones de carácter marcial, contra los que el colectivo se postula diametralmente en contra. «El Ayuntamiento ha militarizado nuestra ciudad con más de 4.000 agentes de seguridad, 1.400 vigilantes privados y un plan director de seguridad que incluye drones de vigilancia y la visita de un portaaviones militar, contra los que nos posicionamos en contra», apuntan. 

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