Pau Ricomà: «No queremos sillas con el PSC, sino transformar Tarragona»

Entrevista al alcaldable de ERC en Tarragona, Pau Ricomà. 

01 junio 2019 19:35 | Actualizado a 16 junio 2019 10:50
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. ¿Se ve de alcalde?
Soy optimista, creo que tengo muchas posibilidades. Hemos logrado una cosa muy difícil tras sumar unos resultados muy buenos. Falta ponerle el lacito.  

- ¿Ve posible una mayoría absoluta alternativa a Ballesteros?
Sí. Somos partidos que durante la campaña nos manifestamos muy claramente a favor del cambio. Y ahora todos tenemos la oportunidad de ser protagonistas de ello.  

- CUP y JxTGN le votarán. Solo falta En Comú Podem. 
Cada partido tiene su tempo y su manera de decidir las cosas. Con esto soy muy respetuoso.

- ¿Ya ha hablado formalmente con los Comuns?
Quedaremos esta semana. 

- Aún no han movido ficha. ¿Qué sensaciones tiene con ellos?
Durante la campaña hemos mantenido una relación fluida, compartiendo muchísimas cosas a nivel programático.

- ¿En qué coinciden?
En la necesidad de que haya más transparencia, honestidad y participación ciudadana, que son elementos que no se han tenido en cuenta durante los gobiernos de Ballesteros.

«Con los Comuns compartimos muchas cosas, como la voluntad de cambio y el objetivo de que el Ayuntamiento tenga más transparencia, honestidad y participación ciudadana»

- ¿La decisión que tomen dependerá de lo que pase en Barcelona con Colau y Maragall?
En nuestro partido no ha habido la mínima presión para tomar ninguna decisión.  

- ¿Es cierto que hay un acuerdo de no agresión a nivel nacional entre JxCAT y ERC para impulsar alcaldías soberanistas?
En ERC no se ha dado ninguna instrucción. Pere Aragonès me ha transmitido su apoyo.  

- ¿Le ha llegado algún mensaje de Oriol Junqueras?
Indirectamente me han hecho saber que Oriol está muy contento.

- ¿TGN es un objetivo estratégico para ERC? Siempre se dice que la ciudad es un territorio difícil para el independentismo. 
El resultado es muy importante. Debemos seguir haciendo lo mismo, que es llegar a todos los sectores de la sociedad.  

- ¿Seguir ampliando la base pasa por un gobierno con los Comuns?
Me gustaría un gobierno entre los cuatro partidos. En Tarragona hay una necesidad de cambio real, con un gobierno transversal.  

- ¿Tiene clara la estructura del ejecutivo si es alcalde?
Sí, pero no el organigrama. Trabajaremos con cuatro ó cinco áreas bien organizadas, sin que cada una de ellas vaya por su cuenta. El Ayuntamiento debe ser sólido.  

«Con Dídac Nadal hemos tenido una coincidencia extraordinaria en campaña. Solo hubo un calentón. Le veo como a futuro socio de gobierno»

- ¿El gobierno actual son varios reinos de taifas?
Ahora no hay ni áreas, cada concejalía va a su aire. La edil de Comerç pidió a las tiendas que pusieran flores y, al día siguiente, la Guàrdia Urbana les multó. Los ciudadanos deben participar mucho más de la gestión cotidiana. Y esto implica tener un ayuntamiento ágil y eficiente.  

- ¿Usted en qué se diferenciaría de Ballesteros como alcalde?
Cada uno tiene su trayectoria profesional. No me veo ni en un caso Inipro ni en un Santa Gadea ni en un caso como el coaching. 

- O la polémica por la contratación del gerente de la EMT. 
Es de ser inútiles... Podían hacerlo perfectamente con una plaza de libre designación, sin concurso.  

- ¿Usted, si es alcalde, cómo designará los cargos de gerencia de las empresas municipales?
Primará la capacidad profesional. 

- ¿Por concurso público?
No. Haremos concurso público en los cargos que deban hacerse, pero lo que no haremos será lo del PSC: disfrazar un concurso porque se tiene mala conciencia de contratar a una persona demasiado cercana al partido. Ha sido patético, el Ayuntamiento ha hecho el ridículo pese a que Néstor Cañete es un buen gerente.  

- ¿Tarragona necesita un gerente de urbanismo?
Sí. Es un cargo necesario. 

«Los puntos que exige la CUP son cuestiones que hemos trabajado con ellos. Las podremos cumplir mejor con un ejecutivo de 14 que de 7»

- ¿Y un gerente general?
No lo descartamos. Más allá de la incomodidad que pueda suponer que pongamos figuras nuevas, que lo haremos sin complejos, necesitamos un trabajo profesional para que la estructura funcione. 

- La CUP le exige para ser alcalde que impulse la remunicipalización de servicios públicos externalizados. 
Los puntos que ha puesto la CUP sobre la mesa son cuestiones que hemos defendido conjuntamente. Si en el gobierno estamos 14 podremos hacer las cosas de una forma más rápida que con siete. 

- El contrato de la basura caduca en febrero de 2023. ¿Lo sacaría de nuevo a concurso?
Tenemos cuatro años para decidirlo. No solo éste, sino todos los externalizados. Lo primero es que debe inspeccionarse mejor cómo se gestiona. 

- La CUP también le exige derogar el plan de la Budellera. 
Tenemos clarísimo que la ciudad tiene otras posibilidades de crecimiento. 

- Ballesteros dice lo mismo. 
Sí, después de cuatro años negándolo. El POUM nos permite hacer muchas actuaciones en pequeños planes de mejora urbana. 

- La Budellera está prevista en el POUM. 
El problema es que, junto a la Vall del Llorito, sus previsiones de crecimiento son antiguas, lejos de la realidad de hoy en día. 

«Si soy alcalde no me plantearía una política de gestos, pero reduciría el cuadro de Felipe VI del Saló de Plens, cuyo tamaño es exagerado»

- Ustedes avalaron el plan cuando aprobaron el POUM. 
Nosotros formábamos parte del gobierno. Y todos votamos a favor porque, en ese momento, el crecimiento parecía imparable. El gran objetivo era preservar la Anella Verda y evitar La Móra 2 y las construcciones previstas cerca del Pont del Diable.  

- JxTGN defiende la Budellera. 
Cada uno defiende lo que cree oportuno. El modelo económico ha cambiado, y ahora tenemos que frenar el número de viviendas en estado ruinoso que tenemos.  

- Usted acusó a Dídac Nadal (JxTGN) de querer el proyecto para «beneficiar a un determinado promotor». 
Hemos tenido entre 15 y 20 horas de debates, en las que las coincidencias con Nadal han sido casi extraordinarias.  

- ¿Extraordinarias?
Los puntos coincidentes han sido muchos, y que hubiera un momento de calentón fue una mala manera, por mi parte, de administrar diez segundos de tensión.  

- ¿Ve en  Dídac Nadal a un futuro socio de gobierno?
Sí, igual que Carla Aguilar y Laia Estrada. 

- ¿El pacto a cuatro sería con la alcaldía siempre para Esquerra?
Sí. Hemos sacado más del doble de concejales que el resto.

- ¿Y si los Comuns le proponen un gobierno con PSC y ellos como han puesto sobre la mesa en Barcelona?
No quiero hablar sobre hipótesis. Solo contemplamos el escenario de un gobierno a cuatro. 

- Usted ha dicho que podría entenderse con Castillo (PSC). 
El diálogo siempre está abierto, pero el tema no es personal, es político. La actitud de Ballesteros el 1 de octubre, mientras la ciudadanía era golpeada, fue vergonzosa y cobarde. 

- ¿Ha hablado con él estos días?
Debo serle sincero. El domingo recibí una felicitación por whatsapp de él que no vi hasta días después. Y le contesté.

- ¿Estaría dispuesto a sentarse con él para hablar?
No tengo problema en hablar con nadie, pero mi prioridad es ligar un gobierno. 

- ¿Quiere ligar un gobierno o solo una investidura para el día 15?
Un gobierno. Si logramos la investidura, asumiremos nuestra responsabilidad en cualquier situación, pero mejor gobernar con 14 que con 7.

- Gobierne quien gobierne será un mandato muy complejo. 
Será maravilloso. Hace cuatro años ni estábamos en el Ayuntamiento. Si solo quisiéramos sillas en el gobierno pactaríamos con el PSC, pero apostamos por cambiar la ciudad.

 - ¿Intentaría tirar hacia atrás el barrio de Ten Brinke?
Debemos mirar si es posible. Si lo es, sí. No queremos que se haga. También retiraremos el recurso al Supremo para ampliar la expansión comercial en Ponent. 

- ERC impulsó que en Ponent pudiera llegar IKEA y ahora quieren frenar la gran superficie. 
IKEA suponía ampliar la oferta actual, pero ahora se quiere traer más de lo mismo. 

- ¿Pondría pancartas independentistas en el balcón del Ayuntamiento?
De momento, no me lo planteo. La gente debe ver el beneficio del cambio profundo que haremos. Esto pasa por encima de los gestos. 

- ¿Quitaría el retrato de Felipe VI del Saló de Plens?
No haremos una guerra de símbolos y cumpliremos la ley, pero el tamaño del cuadro es exagerado. No es lógico que en un consistorio haya un cuadro tan grande.  

- ¿Estará cuatro años en la oposición si no es investido?
Claro, no dejaré de trabajar por una Tarragona con valores de honestidad y republicanismo. 

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