Pistoletazo musical de los Juegos Mediterráneos

Buhos, Ramon Mirabet y Love of lesbian dieron la salida al evento con un concierto multitudinario en la avenida Vidal i Barraquer que congregó unos miles de personas y generó un ambiente festivo antes de la gran cita

21 junio 2018 11:51 | Actualizado a 21 junio 2018 11:58
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Todavía no sabemos la afluencia de espectadores que tendrá la competición de los Juegos Mediterráneos, pero el concierto previo al evento celebrado ayer dejó entrever que algo se empieza a mover en la ciudad.

Unos miles de personas se congregaron en la avenida Vidal i Barraquer para disfrutar del concierto inaugural del evento, protagonizado por tres bandas catalanas de diferentes estilos pero con un público fiel. Buhos, Ramon Mirabet y Love of Lesbian despertaron la ciudad con sus éxitos en un anochecer ya veraniego.

A las ocho de la tarde, como un reloj, arrancaron Buhos. La banda de rock del Penedès empezó algo fría. En parte era lógico. Arrancaba el evento y los espectadores iban llegando progresivamente.

Pero los suyos, mayoritariamente adolescentes y venteañeros, sabían a lo que iban. Canciones que entran con facilidad, que generan buen rollo y ganas de moverse y de salir de fiesta, a pesar de ser un miércoles laborable.

Ello se notó con uno de los clásicos de la formación, Birres, que los asistentes corearon con entusiasmo. La hora y la excepcionalidad del espacio en el que se desarrollaba el festival generó alguna imagen curiosa, como unos runners, aparentemente regulares de la zona, intentaban no detener la marcha a pesar de la multitud que les complicaba su rutina. 

Con el paso de los temas se iban acercando más personas a Vidal i Barraquer, y en paralelo el concierto evolucionaba hacia los éxitos de la banda. Un ejemplo es Prenent la lluna, del penúltimo álbum Lluna plena, al igual que el tema que les catapultó a la fama en toda Catalunya, Barcelona s’il·lumina.

Remataron el concierto con Volcans, sencillo del reciente publicado La gran vida, en el que el cantante Guillem Solé aprovechó para grabar con el móvil mientras unas fuentes de bengalas daban espectacularidad al momento desde el escenario.

Y si Buhos usó el teléfono para inmortalizar el momento, Ramon Mirabet tiró de una cámara GoPro enganchada a un palo selfie. Con su mezcla de soul, folk, indie-rock y pop bajó la intensidad festiva del evento, pero aumentó sensiblemente la calidad musical.

Con ocho músicos en el escenario, y a pesar de que la formación lleva el nombre del líder, quedó muy claro que su fuerza radica en el grupo. Sonaron a un gran nivel ante un público más adulto y quizás no tan conocedor de las letras, pero Mirabet y los suyos consiguieron realizar un recital ascendente gracias a sus estribillos pegadizos y bailables. Arrancaron destaparon su vertiente más soul, con Shake it just like that y Go.

El barcelonés también tenía claro donde estaba y saludó con un «Benvinguts als Jocs del Mediterrani» y agradeció la invitación a una organización en la que el patrocinador Estrella Damm tenía un papel crucial.

La misma marca que le contrató para poner su tema Those little things como banda sonora de su anuncio veraniego y que Mirabet interpretó en el tramo final, junto con Home is where the heart is.

El concierto se terminó con la actuación de Love of lesbian, que finalizó pasada la medianoche.

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