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La propietaria del restaurante Octopussy de El Serrallo no se puede creer lo que ocurrió ayer. Un grupo de jóvenes entró a robar en dos ocasiones a su establecimiento, con dos horas de diferencia.
Se llevaron caras botellas de vino y de champán de la bodega ubicada en la terraza. Virginia Morcillo, la propietaria, ya ha interpuesto las dos denuncias. Todo empezó a las seis de la mañana de ayer, cuando sonó la alarma del restaurante Octopussy, ubicado en la calle Trafalgar del barrio marinero.
La empresa de alarmas avisó a Morcillo de que había intrusos en la terraza y bodega del establecimiento –una especie de pecera de cristal–. Morcillo se trasladó hasta el lugar donde se encontró con agentes de la Guàrdia Urbana que tomaban declaración a cuatro jóvenes, que llevaban botellas de vino. Cuando la propietaria llegó al restaurante se dio cuenta que habían forzado la puerta y faltaban algunas botellas. Después de interrogar a los ladrones, la policía les dejó ir. Morcillo se dirigió hasta la comisaría de los Mossos d’Esquadra para interponer la denuncia.
De vuelta a casa, sobre las ocho de la mañana, la propietaria del establecimiento volvió a recibir una llamada de la empresa de las alarmas. Otra vez había intrusos en el interior del Octopussy. Esta vez sí que se llevaron media bodega. «Había botellas de vino muy caras y de champán que solamente nosotros servimos», explica Morcillo.
Pasados unos minutos, un vecino se acercó a Virginia y le mostró una de sus botellas. «Me dijo que había unos chicos durmiendo a escasos metros de mi restaurante, en unos bancos, y que tenían botellas con etiquetaje mío», relata Morcillo.
Según fuentes de la Guàrdia Urbana, sobre las nueve de la mañana se detuvieron a dos personas, que también habían entrado en el restaurante El Pòsit del Serrallo, y se llevaron una caja de coulants. Según Morcillo, «calculo que lo que se han llevado asciende a unos 600 euros, más o menos. Había botellas de Rioja que valían 60 euros».
