Sin vetos entre Comuns y Junts en la Plaça de la Font

Mail a los militantes En Comú Podem anuncia a sus inscritos que «próximamente» convocará una asamblea para «debatir» la ampliación del gobierno

18 febrero 2021 17:20 | Actualizado a 19 febrero 2021 06:58
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A diferencia de lo que pasa en el Parlament y la Generalitat de Catalunya, en la ciudad de Tarragona Junts y En Comú Podem no se vetan para la más que inminente ampliación del gobierno municipal de la Plaça de la Font. A raíz de los comicios autonómicos del pasado domingo se han hecho públicas las incompatibilidades de proyectos entre los de Carles Puigdemont y los de Jéssica Albiach para formar un nuevo Govern, por lo que Pere Aragonès (ERC) deberá escoger entre uno de ellos –y la CUP– para poder ser investido como 132º President.

Sin embargo, se trata de una situación que no es extrapolable a Tarragona. No debe olvidarse que en la Plaça de la Font la candidatura liderada por Carla Aguilar-Cunill y Hermán Pinedo se conformó sin el aval de las ejecutivas nacionales de Comuns y Podemos –que recientemente expulsó a Pinedo–, mientras que, por su parte, los tres ediles de Junts son independientes después de que Dídac Nadal y Cristina Guzman se dieran de baja hace meses del PDeCAT, mientras que Elvira Vidal siempre ha estado sin partido.

Ampliación de cinco, no de tres

Toda esta situación, junto a la aprobación de los dos presupuestos del gobierno municipal por parte de Junts –incluidos los del Institut Municipal de Serveis Socials (IMSS), presidido por Carla Aguilar– ha facilitado que, desde el inicio del mandato, la relación entre ambas formaciones se haya consolidado mucho más de lo que era previsible. Así lo enfatizó hace semanas Aguilar en una entrevista con el Diari: «Su actitud ha sido muy proactiva y refuerza la línea social en la que creemos. Para 2021 queremos reforzar esta colaboración» afirmó la edil, quien durante la conversación con este periódico añadió: «La realidad política es muy cambiante. El presupuesto no es un final de nada, sino un principio que marca un punto de partida de colaboración. Hablaremos lo que se pueda hablar. No hay ninguna puerta cerrada. Ya veremos».

Este miércoles, además, En Comú Podem Tarragona envió un comunicado a sus inscritos en el que ponía de relieve que «no se ha firmado ningún acuerdo de gobierno» y que «como no puede ser de otra forma», todas las decisiones «serán tomadas por el conjunto de la militancia». En este sentido, desde la coordinadora entre Comuns y Podem de Tarragona se anunció a la militancia que «próximamente os convocaremos para debatir esta cuestión», decidiendo, esto sí, «según los tempos internos».

Se da el caso de que Tanto Tarragona en Comú como Podemos, por separado, deberán votar el posible pacto de gobierno, por lo que podría pasar que cada una de las formaciones decida una cosa distinta. Según las fuentes consultadas por el Diari, es muy probable que los asociados –sobre todo de Comuns– avalen la ampliación del equipo de la Plaça de la Font, ya que después de 20 meses de gestión «se ha constatado que la ampliación es necesaria», según indican las fuentes consultadas. Esto sí, desde el entorno de los Comuns se deja claro que lo que se aprobaría, en todo caso, sería «una ampliación con Junts y la CUP para reforzar el gobierno desde la izquierda», por lo que descartan la entrada solo de los tres ediles de Junts.

Nadal apuntaría a Comerç

Precisamente, desde Junts su portavoz –Dídac Nadal– descartó el pasado miércoles en una entrevista en Ràdio Ciutat de Tarragona que su formación pida asumir Cultura, Hisenda o Urbanisme. «Estas carteras se están gestionando bien», reconoció el edil quien, esto sí, remarcó que le parecería «coherente» responsabilizarse de Comerç, una vez también preside Espimsa. A diferencia de los Comuns, la posible incorporación de Junts al equipo de Ricomà no debería pasar por ninguna asamblea, si bien desde el grupo municipal se recalca «mantener puntualmente informados» tanto a Junts per Catalunya como al PDeCAT, que a su vez –y también a diferencia de a nivel nacional– no vetaría un pacto con la CUP. Sin embargo, las cupaires siguen sin recibir la «propuesta política» que exigieron a ERC y Comuns para llevar el acuerdo ante su asamblea local. Cinco días después del 14F, el pacto de la Via Tarragona sigue en compás de espera.

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