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Un ciudadano polaco se enfrenta a cuatro años de prisión y a pagar una multa de 1.505.865 euros como autor de un delito contra la salud pública. Presuntamente, conducía un camión, que iba cargado con dos apisonadoras, en cuyo interior los Mossos d’Esquadra encontraron 62,640 kilos de marihuana con destino a Alemania. Así lo solicita el fiscal en su escrito de conclusiones provisionales, donde también incluye la destrucción de la droga y de las dos apisonadoras.
El acusado, el 21 de julio el año pasado, acudió a una empresa del polígono industrial Francolí de la ciudad de Tarragona. Cargó dos máquinas apisonadoras, una con un peso de 1.750 kilos y la otra, de cuatro toneladas. El objetivo era transportarlas hasta Alemania.
En un control aleatorio de transporte de mercancías establecido por los Mossos d’Esquadra en el área de servicio Montseny Nord, en el punto kilométrico 117 de la autopista AP-7, en Llinars del Vallès, los agentes de la Policía Autonómica sospecharon. Tras una primera inspección de las máquinas por los agentes y por la unidad canina, se detectó un fuerte olor a sustancias estupefacientes. Por ello, inmediatamente se procedió a la apertura de los rulos. En ese momento se encontraron 62 paquetes de marihuana.
Una vez analizada la sustancia, se determinó que tenía una pureza de entre el 11,4 y el 16,5 por ciento. El valor en el mercado hubiera sido de 376.466 euros.
El acusado fue detenido al día siguiente de la intervención policial y, dos días después ingresó en prisión preventiva.
