Solo ERC tiene claro su candidato a dos años para las Municipales en Tarragona

Elsa Artadi (Junts per Catalunya) dio la pasada semana el pistoletazo de salida para las Elecciones Municipales de 2023. La diputada en el Parlament y concejala en el Ayuntamiento de Barcelona por la formación de Carles Puigdemont ha rechazado ser la vicepresidenta económica del nuevo Govern de Pere Aragonès (ERC) para centrarse en su objetivo para relevar a Ada Colau como alcaldesa de la Ciutat Comtal. «La cuestión no es que renuncie a ser miembro del nuevo Govern, sino que mantengo mi total compromiso con Barcelona para hacer realidad el cambio en nuestra ciudad y hacerlo con todos vosotros en 2023» defendió la política en una carta enviada a la militancia juntaire.

En el Ayuntamiento de Tarragona, en el ecuador del mandato municipal y justo a dos años para la próxima cita local con las urnas, solo Esquerra Republicana tiene claro su alcaldable (Pau Ricomà) para 2023. De hecho, la mayoría de partidos aún ve lejanos los comicios, y no se prevé iniciar la maquina interna para designar a sus candidatos hasta después de verano para tener definidos a los candidatos entre finales de este año y principios de 2022. De momento, lo que está claro es que, respecto a 2019, no repetirán los candidatos del PSC, de Ciutadans y de la CUP, mientras que son duda los de Junts, En Comú Podem y el PP.

Vía libre para Ricomà

Por primera vez desde la restauración de la democracia, Esquerra Republicana afrontará unos comicios en Tarragona desde la alcaldía. Esto frena cualquier tipo de rumor si Pau Ricomà quiere ser por tercera vez consecutiva candidato de ERC. Y él mismo ya ha anunciado en varias ocasiones que está con «fuerza e ilusión» para aspirar a la reelección. «Si él quiere, estoy segura de que la militancia le dará un apoyo total», afirma la presidenta local, Mònica Alabart, quien añade que el proyecto en la alcaldía de Esquerra «está a medias, ya que un mandato es poco tiempo para implementarlo». Pese a ello, desde el partido con sede en la calle Reial se detalla que «por primera vez, la ciudadanía puede ver qué significa que el alcalde sea de ERC, y percibimos muy buenas sensaciones». «Se han dejado atrás los macroproyectos y se apuesta por dignificar el espacio público y mejorar las instalaciones del deporte de base. Estamos seguras que nos avalará el buen trabajo hecho», añade Alabart.

Ahora, la gran duda es saber si el alcalde afronta el segundo tramo del mandato con más músculo en el gobierno municipal y se confirma la ampliación del ejecutivo con la incorporación de las dos ediles de la CUP, que se sumarían a los siete de Esquerra y a los dos de En Comú Podem, para sumar once de los 27 representantes en el Saló de Plens. Precisamente, todo son dudas aún entre las otras dos formaciones que podrían complementar a ERC en el gabinete de la Plaça de la Font. Por una parte, tanto en Podem como en Tarragona en Comú aún no se ha iniciado el proceso interno, sino que se espera tener una idea clara de la candidatura a principios de 2022. «Se ha hablado ya en alguna asamblea nacional sobre las Municipales, pero será después de verano cuando se darán los primeros pasos», se afirma desde la formación morada, a la vez que se señala que «para 2023 tendremos un partido más unido y reforzado que en 2019». Asimismo, los Comuns se encuentran ahora en pleno proceso para definir a su ejecutiva local, y sus cálculos son los de escoger al candidato «en el primer semestre del próximo año», a a la vez que aún es una incógnita saber si Carla Aguilar-Cunill repetirá como ‘1’ de la coalición.

Por lo que refiere a la CUP, la formación aún ve lejana la convocatoria, y se centra en «hacer las cosas radicalmente diferentes, si se puede ahora desde dentro del gobierno municipal, para demostrar que es posible». Por ello, la previsión de los anticapitalistas es la de iniciar el debate del candidato «hacia finales de año», ya que antes se prioriza «dar el salto importante» que supondría entrar en el ejecutivo municipal. De todas formas, lo que está claro es que Laia Estrada no será la alcaldable en 2023. Primero, porque está en el Parlament y, segunda, porque no puede ser edil más de dos mandatos.

¿Qué hará Nadal?

Otro de los puntos interesantes para 2023 será conocer qué hará Dídac Nadal, portavoz de Junts per Tarragona y que la pasada semana rompió negociaciones con ERC y CUP para sumarse al gobierno de la Plaça de la Font. El postconvergente no es afiliado ni de Junts per Catalunya ni del PDeCAT, por lo que de momento no tiene formación para dentro de dos años. «Cada día pienso en dejarlo», contestó el pasado lunes a una pregunta de una rueda de prensa. Además, la formación de Puigdemont se desmarca de cualquier vinculación con el grupo municipal del Ayuntamiento, y afirma que antes de acabar 2021 «se activará el proceso de primarias para escoger al alcaldable entre los militantes de la formación», según indica el secretario de organización en Tarragona, Jordi Peláez, quien para dentro de dos años se marca el objetivo de sumar «los 12.000 votos» que Junts logró en la ciudad en las Europeas de 2019. Si quiere repetir como candidato, pues, Nadal deberá afiliarse a Junts per Catalunya o el PDeCAT si quiere seguir en el entorno de la antigua CiU. Como curiosidad, el exconcejal Agustí Mallol ya ha hecho saber su voluntad por presentarse.

Cambio de etapa en el PSC

Donde también habrá novedades y se prevé un cambio histórico es en el PSC, una formación que ha presentado al mismo alcaldable en Tarragona desde 2003: Josep Fèlix Ballesteros. El histórico líder socialista– que fue alcalde entre 2007 y 2019, que aún concejal y diputado provincial y que está inmerso de lleno en el caso Inipro– dejará la política institucional en dos años. Conscientes de ello, en la calle Ramón y Cajal ya preparan el relevo, y tres son los nombres mejor posicionados para tomar el mando municipal: el diputado Rubén Viñuales y los concejales Sandra Ramos y Berni Álvarez. De hecho, según las fuentes consultadas, los tres tienen muchos números para ser los tres primeros de la candidatura para 2023, que empezará a tomar forma antes del próximo 31 de diciembre. En caso de que el ‘1’ fuera Viñuales, se daría el caso de que sería la tercera ocasión en la que el político, de 37 años, se presente... ya que en 2015 y 2019 lo hizo como alcaldable por Ciutadans, partido que dejó el pasado mes de diciembre para dar el salto al Parlament de Catalunya con la formación socialista.

Cs y PP lo ven aún lejano

Precisamente, desde Ciutadans aún no aparece en el horizonte las Elecciones Municipales de 2023. Los naranjas están viviendo un auténtico Dragon Khan durante este mandato, hasta el punto que ya no cuentan con ninguno de los cuatro ediles que, en junio de 2019, iniciaron el curso. Además de Viñuales, los ediles Sonia Orts y José Luis Calderón también se dieron de baja y pasaron a ser concejales no adscritos, mientras que la pasada semana se hizo público que el hasta ahora portavoz –Francisco Domínguez– también deja el acta para volver a su plaza de funcionario en el propio Consistorio. Esto sí, sin dejar el partido. «Aún no estamos pensando en 2023. Nuestra prioridad ahora es trabajar y ser útiles para los tarraconenses, y no los intereses partidistas o particulares», destaca la actual portavoz, Lorena de la Fuente.

Finalmente, el PP tampoco se plantea aún como una urgencia la elección del candidato. «Estamos en el ecuador, aún queda mucho», indica el portavoz local, José Luis Martín, quien está «a disposición del partido» para repetir como alcaldable. Asimismo, y pese a los malos resultados del pasado 14F, el líder popular destaca que su formación «mejoró registros» en la ciudad, convirtiendo Tarragona en una de las pocas notas positivas para los de Alejandro Fernández de cara a 2023.