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El Ayuntamiento de Tarragona iniciará el próximo año el plan para reforzar la estructura municipal. Así lo asegura al Diari el concejal de Serveis Centrals, Jordi Fortuny (ERC), quien avanza que durante este otoño se convocará el proceso para sacar a concurso en 2020 un total de 104 plazas que ahora están ocupadas de manera provisional, y que de esta manera pasarán a ser fijas dentro de la arquitectura de la administración de la Plaça de la Font.
Por ello, la voluntad del equipo de gobierno municipal (ERC-Comuns) es la de consolidar y fijar puestos de trabajo que, en estos momentos, o bien están vacantes o bien están ocupados por personal interino, por empleados procedentes de planes de ocupación o mediante una comisión de servicios.
«Tenemos problemas de funcionamiento. Debemos muscular más la estructura y estabilizarla. De hecho, lo lógico sería convocar procesos cada año para actualizar la plantilla», afirma el edil republicano, quien lamenta que «en algunos departamentos la media de edad es elevada porque hace años que no se convocan plazas y había tasa de reposición cero».
En concreto, la mayor parte de la consolidación se llevará a cabo entre auxiliares administrativos, donde está previsto hacer fijos a un total de 36 puestos. Asimismo, también se fortalecerán 20 puestos de trabajo de subalternos, así como los de 16 diplomados en Treball Social.
11 en Educació y seis en Territori
Entre las áreas que también se sacarán a concurso están 11 puestos de profesores y maestros. En concreto, se apostará por plazas de profesor en la Escola d’Adults y maestros de violín, saxofón, acordeón, lenguaje musical, entre otros. También se consolidarán dos plazas de educadores en Llars d’Infants.
La actualización de la plantilla también pondrá un especial énfasis en el departamento de Territori, donde en los próximos meses está previsto confirmar a dos ingenieros técnicos, dos delineantes, un técnico de Protecció Civil y un auxiliar de cartografía.
Asimismo, otras áreas que contarán con refuerzos estructurales serán Assessoria Jurídica, Contractació, Salut Pública y Fiscalització, además de una plaza de arqueólogo, otra de un técnico de Gestió Pressupostària y uno de Prevenció.
«Una administración más ágil»
La portavoz del PSC, Sandra Ramos, recalca que, durante los últimos años, «se han dado grandes pasos, como la adaptación a la administración electrónica». En este sentido, la representante del principal partido del Saló de Plens tiene claro que «los grandes cambios que deben abordarse en el futuro requieren del consenso de todas las fuerzas políticas», en un ejercicio de «responsabilidad» que «hasta ahora, no todos están dispuestos a hacer».
Por su parte, Cristina Guzman –de Junts per Tarragona– se muestra partidaria de «apostar definitivamente por una administración más ágil», por lo que apuesta por «incrementar personal» para «modernizar» la estructura municipal. Desde la formación soberanista, se aprueban las últimas modificaciones realizadas –como por ejemplo el aumento en las plazas de Llars f’Infants–, pero advierten de que estos movimientos «no son, en absoluto, suficientes» para «estar a la altura del ritmo actual de la sociedad».
Finalmente, Laia Estrada (CUP) critica que «durante los últimos mandatos, la política de Recursos Humans se ha centrado premiar o castigar al personal», por lo que «ahora sufrimos las consecuencias, con una estructura que tiene muchas cabezas y pocos pies». A juicio de la edil de la formación cupaire, la situación «no se superará con más cargos directivos, sino optimizando la plantilla, motivando los trabajadores y reforzando las áreas con menos empleados públicos».
