TGN podría multar con mil euros a las paradas que cerraron 6 sábados

Los juristas municipales indican que no pueden pasar por alto los cierres sin permiso de las tardes de los fines de semana

08 mayo 2017 15:52 | Actualizado a 23 mayo 2017 10:13
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El Ayuntamiento de Tarragona ya lo tiene «todo a punto» para iniciar los expedientes sancionadores a las pescaderías que cerraron sin permiso los seis primeros sábados por la tarde de actividad del nuevo Mercat Central, que fue inaugurado el pasado 16 de marzo. Así lo aseguraron recientemente los servicios jurídicos municipales a los paradistas, después de que la mayor parte de puntos de venta del sector del pescado bajaran la persiana a partir de los mediodía los primeros  fines de semana sin contar con el permiso de Espimsa. 


Se da la circunstancia de que el pasado sábado sí que se pudo comprar pescado en el Mercat, ya que los representantes de las pescaderías acordaron con Espimsa que haya tres puntos de venta los sábados por la tarde, y uno los lunes. Pese a ello, según las fuentes consultadas por parte de este periódico, la Secretaria General de la corporación local ha advertido a las pescaderías de que «la maquinaria administrativa ya está en marcha» para sancionar las paradas que no han cumplido el reglamento durante los primeros fines de semana. 


De hecho, los servicios jurídicos afirman que «la negociación de los horarios no exime a los comerciantes del cumplimiento del reglamento» y que, en caso de no iniciar los expediente, los funcionarios y políticos de la administración de la Plaça de la Font «podrían estar cometiendo un delito de prevaricación», ya que el Ayuntamiento «ya cuenta con toda la información y todo tipo de material» para iniciar, en breve, los expedientes sancionadores por el incumplimiento del reglamento del Mercat. 


‘Actuación proporcionada’
Las fuentes consultadas por el Diari indican que la actuación de los servicios municipales será «proporcionada» y que, de momento, se centrará en las no aperturas del sábado por la tarde, «que es la franja horaria que más afecta a la imagen del Mercat» según remarcan desde el Consistorio. 


Los servicios jurídicos especifican que lo primero que se hará será enviar a cada paradista un decreto en el que se detallan los días y las horas del incumplimiento que ha realizado cada vendedor, y que los trabajadores de Espimsa ya tienen controlados. Una vez enviada la notificación se abrirá el periodo de alegaciones que, en caso de no prosperar, acabará «en una sanción grave, pero sólo a nivel económico», según indican las fuentes municipales. 


Según el reglamento de funcionamiento del Mercat Central –que fue aprobado en abril de 2015–, las faltas graves cuentan con una multa económica que oscila entre los 751 y los 1.500 euros. Los servicios jurídicos indican que, en la primera sanción, la cifra «será intermedia» entre los dos extremos, una circunstancia que será «más próxima a los 1.500» en caso de reiteración.


En la última reunión de la comisión negociadora, las pescaderías alegaron que están negociando una solución con Espimsa. Los juristas creen, sin embargo, que los vendedores del Mercat deben cumplir el horario pese a las discrepancias con la empresa gestora. 


El reglamento estipula la obligación de abrir entre las 9 y las 20 horas de lunes a sábado, si bien existe la posibilidad alternativa aprobada en el consejo de administración de Espimsa de abrir a las 8.30 y cerrar a las 21 horas bajando la persiana los sábados por la tarde, los lunes por la mañana o cada día de 15.30 a 17 horas. 


‘Cumplir el reglamento’
La presidenta de Espimsa, Elvira Ferrando (PSC), indica que los representantes municipales –tanto la Secretaria General como los delegados del PSC, Ciutadans, PP y ERC– «recordamos a los paradistas que deben cumplir con el reglamento». Ferrando indica que, en el documento de funcionamiento, «se establece un horario mínimo a cumplir» y se muestra «abierta al diálogo» con las pescaderías críticas. La edil socialista asegura que «en el reglamento, las pescaderías ya tienen un trato especial, como es el hecho de no tener que abrir los lunes», a la vez que pide «un mayor margen» para saber si los horarios son óptimos o deben modificarse». 


Por su parte, la presidenta de los vendedores, Maria Virgili, afirma que «antes de entrar ya se conocía el reglamento» que, a su juicio, «es el Ayuntamiento quien debe hacerlo cumplir». Virgili remarca que «estamos en un momento de transición, ya que acabamos de abrir pero aún no se ha desmontado la carpa y no han abierto las paradas que recientemente se han adjudicado, que seguro que también abrirán los sábados por la tarde». 

 

 

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