Tarragona exige a la Generalitat que pague lo que falta del Palau

El pleno municipal avala una moción del PP en la que también se reclama el traspaso del recinto. El texto se aprueba con el apoyo de PSC, Cs y de Junts, y la abstención de la CUP

20 noviembre 2020 17:20 | Actualizado a 09 enero 2021 18:25
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El Saló de Plens telemático de este viernes del Ayuntamiento de Tarragona ha aprobado una moción del PP en la que el Consistorio acuerda «solicitar a la Generalitat de Catalunya que complete todas las inversiones pendientes para que el Palau d’Esports pueda acoger toda la actividad deportiva ordinaria de los clubes y entidades, así como a todos los ciudadanos en general». La propuesta –además de la formación conservadora– ha sido apoyada por PSC, Ciutadans y Junts, mientras que la CUP se ha abstenido. El gobierno municipal –formado por ERC y Comuns– ha votado en contra.

De esta forma, la mayoría de representantes de la cámara de la Plaça de la Font se une para que sea la administración autonómica la que asuma los 500.000 euros que se calcula que faltan por invertir en el equipamiento de referencia del Anillo Mediterráneo. La última fase de las obras del recinto consisten en la compra del parqué, las cortinas separadoras y material como canastas de baloncesto y porterías de fútbol sala, que el Consistorio ahora insta a que sea el Govern quien asuma su instalación.

Asimismo, en el texto del PP también se pide a la Generalitat que «formalice el traspaso gratuito del Palau, según regula la Llei de Subvenciones o la legislación Patrimonial», defendió ayer la concejal popular Elisa Vedrina, recalcó que el Govern «ya ha gastado 400.000 euros en seguridad, cuando podría haberlo destinado a su puesta a punto».

Opción «paralizada»

El portavoz del ejecutivo local, Manel Castaño (ERC), ha recordado que el pasado mes de julio la oposición –junto a Junts– se unió para frenar la operación que Generalitat y Ayuntamiento habían acordado para traspasar el uso del Palau.

La intención de los juristas municipales y del Govern para desencallar el uso del pabellón era que primero el Consistorio aprobara la cesión del solar –de 9.586 m2 y valorado en 700.000 euros– para que, posteriormente, la corporación autonómica hiciera la misma «mutación demanial» con la parte construida, cuyo coste de edificación fue de 18 millones.

Para llegar a esta opción tras dos años de negociaciones, el Parlament de Catalunya aprobó el pasado 24 de abril dos modificaciones de las leyes de Patrimoni y Règim Local, que se incluyeron en la Llei d’Acompanyament de los presupuestos autonómicos. Sin embargo, esta vía no pudo ni votarse en el pleno. Castaño lamenta, además, el «documento fantasma» que «no encontramos» que haría referencia a la voluntad de traspaso del equipamiento una vez construido el recinto de Campclar.

Ayer, Berni Álvarez (PSC) lamenta que, en una contestación por escrito recibida por parte del gobierno local, «se reconozca que no está previsto ningún plan de usos ni para el Palau ni para el Anillo Mediterráneo». Más contundente es Francisco Domínguez (Cs), quien teme que si la negociación se alarga mucho más «veremos cómo se desmonta». Finalmente, Dídac Nadal (Junts) exige que «se clarifique si el Palau es del Govern o de la ciudad», así como que «se abra de una vez por todas».

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