Tarragona quiere que el Seminari sea la biblioteca pública de la Part Alta

El Consistorio busca que el espacio cuente con material de su fondo bibliográfico. El personal necesario para abrir más horas podría cubrirse mediante un plan de ocupación municipal

19 mayo 2017 16:54 | Actualizado a 21 mayo 2017 16:07
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El Ayuntamiento y el Arquebisbat de Tarragona están a un paso de firmar un convenio de colaboración mediante el cual el recinto cultural del Seminari abriría más horas y tendría fondo bibliográfico municipal para poder ejercer como biblioteca pública de la Part Alta. Así lo asegura al Diari el concejal de Cultura, Josep Maria Prats (Unió Democràtica), quien remarca que el objetivo de la corporación local es el de poder sellar el acuerdo a principios de año para que el espacio que reabrió en 2014 tras casi medio ciclo cerrado al público se integre «desde mediados de 2017» al servicio municipal de bibliotecas, actualmente formado por la del centro cívico de Torreforta y la sala de lectura de Sant Pere i Sant Pau.

Actualmente, la biblioteca del Seminari abre al público de lunes a jueves de13.30 horas y de 16 a 19.45, y cierra los viernes, los sábados y los domingos. Con la ampliación horaria, el espacio pasaría a tener actividad también los viernes y los sábados por la mañana.

«Estamos a punto de cerrar el acuerdo», reconoce el máximo responsable del área de Cultura municipal, quien añade que la voluntad de ambas partes es que el emplazamiento sea el equipamiento bibliográfico de referencia del Casc Antic. A parte de su enorme fondo –formado por unos 130.000 volúmenes– el recinto contaría con material municipal referente a la ciudad y de carácter infantil y juvenil. «El Seminari cuenta con un fondo de referencia en Catalunya. Es importantísimo. Creemos que con su propieda y lo que podamos aportar podemos hacer de este espacio un emplazamiento de uso ciudadano», relata el edil.


Operación ‘low cost’
«Con el acuerdo podríamos dar salida al déficit de espacios que tenemos en la Part Alta y, además, nos ahorraríamos construir una biblioteca y aprovecharíamos un equipamiento extraordinario ya existe», remarca Josep Maria Prats, quien indica que el acuerdo sería «como concertar el espacio», al estilo de lo que se hace en materia educativa con las escuelas concertadas.

«Hemos mantenido muchas conversaciones durante las últimas semanas y estoy seguro de que será una de las grandes novedades que podremos presentar el próximo año en el plan cultural de la ciudad hasta el año 2020», destaca el edil de la formación democristiana, quien reconoce que «en estos momentos no estamos una situación económica como poder construir más equipamientos», por lo que «debemos tener imaginación para aprovechar espacios ya existentes, como éste», que podría iniciar su ampliación horaria «en pocos meses», según señala el máximo responsable cultural del Ayuntamiento.

Prats indica, asimismo, que el convenio que se firmará en breve «es una fórmula de bajo coste y perfectamente factible. Nuestra idea es que tenga el mismo horario que el resto de espacios municipales de estas características». En este sentido, el teniente de alcalde de Cultura asegura que uno de los puntos del acuerdo será que el Consistorio «pondrá algún apoyo» para que el recinto pueda ampliar su horario de actividad. «Pondremos alguna persona, pero la inversión será muy reducida. De hecho, podría hacerse mediante un plan municipal de ocupación», afirma el responsable del equipo de gobierno.


Un espacio de referencia
El emplazamiento situado en la calle de Sant Pau reabrió al público en el año 2014 después de48 años cerrado al público, tras la marcha en 1968 de los seminaristas hacia Barcelona y el cierre de los estudios en Tarragona. Entonces, la biblioteca del Seminari quedó desamparada después de nacer en el siglo XVI y estar en Pla de Palau desde el año 1883.

Hasta 1995, la Biblioteca fue una sala cerrada. Fue entonces cuando mosén Martí Aixalà intentó poner al día la gran cantidad de volúmenes existentes, pero sin pensar jamás que una década después se activaría un proyecto para su reapertura. Este paso se daría en 2005, cuando empezó el proyecto de restauración del Seminari y de la propia biblioteca.

Las obras de reforma se iniciaron en 2011 y supusieron una inversión de ocho millones de euros para poner al día los 7.000 metros cuadrados de superficie con los que cuenta.

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