Toque de queda para más de 463.000 tarraconenses

Más de 463.000 tarraconenses afrontarán a partir de este fin de semana un nuevo toque de queda nocturno, esta vez entre la 1.00 y las 6.00 h. de la mañana, si el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSCJ) autoriza la medida propuesta por la Generalitat para mitigar la incidencia de la quinta ola. Se trata de más de la mitad de la provincia. En concreto, el 56% de la población tarraconense deberá asumir este confinamiento de madrugada si la justicia lo valida. 

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha anunciado la decisión en una comparecencia institucional en el Palau después de reunir al comité de seguimiento de Covid-19 y ha indicado que es una medida «difícil pero imprescindible» que afectará a los municipios de más de 5.000 ciudadanos con una incidencia acumulada de 400 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días. Eso, trasladado a la coyuntura epidemiológica de la provincia, repercute en los principales municipios. De entre los grandes del Camp de Tarragona, únicamente se salva El Vendrell, con una incidencia acumulada de 374, según los últimos datos oficiales de Salut. También evitan la restricción Amposta y Tortosa (232) y Amposta (195), que se benefician de una cierta benevolencia del virus, en estos momentos en el Ebre. 

En la lista hay casos variados. Desde Calafell o Vila-seca, que superan por poco el umbral, a ejemplos como el de Salou, con una incidencia de más de 1.000 casos y un riesgo de rebrote de más de 3.000. Más allá de los diez grandes, hay otras poblaciones, muchas de ellas en la costa, más densa, que también se verán afectadas. Es el caso de Deltebre, Torredembarra, Vandellòs i L’Hospitalet de l’Infant o Cunit. Otros núcleos de interior como La Selva del Camp, Alcover o Riudoms figuran en la relación, en la que está también La Canonja.  

«La situación es muy delicada, es extremadamente frágil; adoptamos una medida del todo excepcional que restringe el derecho a la movilidad de la ciudadanía en 158 municipios, que aglutinan a la mayor parte de la población de Catalunya», ha dicho Aragonès.

El objetivo es reducir las actividades sociales que facilitan la propagación del virus, con el fin de «proteger la salud de la ciudadanía» y el «buen funcionamiento del sistema sanitario», que se está «tensionando excesivamente en los últimos días» con esta quinta ola de que «amenaza a Catalunya», ha asegurado.

En global, la restricción atañe también a localidades como Barcelona, L’Hospitalet del Llobregat, Terrassa, Badalona, Sabadell Mataró, Santa Coloma de Gramanet, Reus, Girona, Sant Cugat del Vallès, Cornellà, Granollers, Castelldefels, Blanes o Sitges. 

Mossos y policía local serán de nuevo los encargados de vigilar el toque de queda, una vez lo avale el TSJC y sea publicado en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC), y en caso de incumplimiento podrán imponer sanciones que oscilarán entre los 300 y los 6.000 euros.