Un abogado de Tarragona denuncia el acuerdo entre la UE y Turquía

Considera «vergonzante» la respuesta de Europa al conflicto, al dejarlo en manos de un país que considera de poco fiar

19 mayo 2017 19:12 | Actualizado a 21 mayo 2017 17:24
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Un abogado de Tarragona, Antoni Mendia, ha denunciado ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas el acuerdo suscrito entre la Unión Europea y Turquía para expulsar al país asiático a todos los migrantes que lleguen de forma irregular a las islas griegas del Mar Egeo. Por cada expulsión, la UE realojará en su territorio a un refugiado sirio hasta cubrir una primera tanda de 72.000 personas, según los detalles del pacto. La denuncia va contra los 28 estados miembros de la Unión Europea y Turquía. Las personas que lo quieran podrán descargarse el documento y denunciar también el caso ante dichas instituciones. Pueden hacer servir el mismo redactado o modificarlo: «Cuantos más seamos, más presión haremos», comenta el abogado. Recuerda que la interposición de la denuncia no comporta gastos ni hay costas.

El letrado, en la denuncia ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, recuerda que oficialmente el acuerdo se centra en acabar con la migración irregular que se realiza desde la república turca hacia territorio europeo. La vía de actuación implica que se procederá mediante la devolución a Turquía de cualquier migrante irregular que haya utilizado la frontera de este país con Grecia. Para el letrado, «se ha podido observar cómo en la práctica se está procediendo a practicar devoluciones colectivas que en nada se corresponden con la simple formulación de un procedimiento que reordene la situación de todas las personas que intentan refugiarse en los distintos estados europeos huyendo de la guerra», como lo demostrarían diversas organizaciones y entidades, como la propia Acnur  (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) o Médicos sin Fronteras.

El abogado se lamenta de que cuando el refugiado consigue superar la totalidad del territorio de la República de Turquía y entra en espacio estrictamente europeo «lo único que encuentran todas estas personas es un entramado sistémico que dice preocuparse por la situación de guerra en su país pero que, por no ostentar una regularización simplemente burocrática tiene que volver a los campos de refugiados absolutamente hacinados de Turquía, nos encontramos ante la más ignominiosa y vergonzante respuesta que un continente entero, con capacidad suficiente para poder responder de forma efectiva con la colaboración de las sociedades que ya han soportado más el peso del conflicto armado sirio, puede dar en pleno siglo XXI».

Para este letrado, la falta de mecanismos que permitan coordinar a nivel interestatal las cuestiones de asilo, aun cuando por parte de la Unión Europea se exponga que se coordinan esfuerzos para proceder de forma más rápida posible a esta situación a través del Emergency Response Coordination Centre (ERCC), conllevan que se deje a miles de persones en un estado que carecen de los recursos necesarios para poder responder correctamente ante esta situación.

Mendia señala que aun siendo evidentemente una normativa de aire regional y que se aplica a tan solo en las relaciones que la misma Unión Europea y los Estados que forman parte de la misma para con terceros, «la vulneración flagrante que con su ignorancia se comete sobre los derechos humanos inherentes a toda persona independientemente de su sexo, edad, raza, procedencia o cualquier otro motivo que pueda esgrimirse por su soslayo, muestra la vía tendenciosa, vil y de una peligrosa insolidaridad para con el trato que recibe un ser humano dependiendo del contexto en el que se encuentre y de quién sea».

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