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Agentes de la Unitat d'Investigació de los Mossos d'Esquadra de la comisaría de Tarragona detuvieron a un hombre, de 38 años, de nacionalidad colombiana y vecino de Tarragona como presunto autor de un delito de estafa.
La investigación se inició a raíz de la denuncia presentada por una operadora de telefonía el pasado 24 de enero, que había detectado una manipulación de algunas de sus líneas con el fin de establecer conexiones automáticas a números con prefijo 803 calificados como servicios de pago.
El hecho no sólo afectó la compañía denunciante sino también varios de sus usuarios de una misma zona de Tarragona comprendida entre el polígono industrial Riu Clar, los barrios de Ponent y La Canonja.
Además, todas las manipulaciones se efectuaban diariamente en una misma franja horaria, entre las diez de la mañana y la una de la tarde.
La operadora detectó la primera incidencia en algunas de sus líneas telefónicas el 28 de noviembre del año pasado cuando alguien manipuló las conexiones del punto de reparto de una zona concreta ubicadas en un armario metálico a pie de calle .
Desde entonces y hasta el 19 de enero de este año, la empresa registró un total de 266 llamadas a dos números de pago con prefijo 803, de las cuales más de la mitad tenían una duración de 30 minutos cada una. Este hecho generó pérdidas por valor de casi 5.800 euros, un importe el que de entrada se facturaba a los clientes de las líneas afectadas por esta estafa.
Se da la circunstancia de que no era necesario que los titulares de estas líneas efectuaran ninguna llamada dado que la manipulación ilícita que se hacía desde los puntos de reparto permitía el inicio automático de las conexiones con los dos números de pago.
El paado miércoles, los investigadores sorprendieron in fraganti a un hombre cuando efectuaba una nueva manipulación en uno de estos armarios ubicado entre las calles Ferro y Granit, en el polígono industrial Riu Clar de Tarragona.
El desconocido iba disfrazado con un uniforme para simular que trabajaba como técnico de telecomunicaciones.
Las incongruencias y contradicciones de sus explicaciones y el hecho de manifestar que no era ningún operario autorizado para manipular aquella instalación, comportó su inmediata detención.
Al sospechoso se le intervinieron hasta cinco teléfonos móviles, dos de los cuales estaban conectados en ese momento a las líneas de dos de los abonados de la operadora denunciante, concretamente dos empresas ubicadas en este polígono industrial.
Los investigadores pudieron determinar que detrás de los dos números con prefijo 803, había como beneficiaria una persona, la que por cada llamada recibida obtenía una retribución de sesenta y dos céntimos de euro por minuto, con impuestos no incluidos.
El detenido pasó este viernes a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Tarragona, quien decretó su puesta en libertad con cargos.
