Valeria

Cuando prácticamente todo el mundo se ha adentrado en el colorido mundo de Valeria para Netflix, vale la pena desempolvar los libros con los que Elísabet Benavent consiguió agitar el mercado editorial español en 2013 con las historias de estas cuatro jóvenes amigas residentes en Madrid. 

La súper record de ventas Elísabet Benavent creó hace más de ocho años el mundo de Valeria. Ella es una joven escritora no llegada a la treintena, con tres amigas igual de estupendas física, estilosa y profesionalmente que ella. Pero cada una viene con su problema particular: la desinhibida Lola tiene un lío con un chico con pareja estable que la utiliza interesadamente, la insegura Carmen odia a su jefe y está enamorada en secreto de su compañero Borja, Nerea sigue atrapada en su última ruptura, de la cual no logra deshacerse y Valeria está atascada en su nuevo libro y... en su matrimonio con Adrián, un joven fotógrafo que, dicho sea de paso, también es guapísimo, cómo no... Pero de repente aparece Víctor. ¿Qué quién es Víctor? Chicas, el Christian Grey español: joven, guapo, rico y con un sólido negocio entre manos, seguro de sí mismo, dadivoso, sexy, interesante, elegante, divertido, sexualmente portentoso... que se siente atraído por Valeria nada más verla. 

Las dudas, la culpabilidad, la seducción, las ganas,... el doble juego con un Adrián con el que parece que la relación hace aguas mientras que con Víctor el amor toma otros carices, además de su nacimiento como escritora marca el punto de salida de la saga con En los zapatos de Valeria. 

Realmente la primera temporada de la serie tiene muchas diferencias con respecto a los libros. Aunque visualmente en pantalla es preciosa, con unas localizaciones que tienen loca a media ciudad para visitarlas, un juego de colores que te atrapa, unos pisazos que sorprende que puedan pagarse con cuentas bancarias como la de Valeria, unos llamativos looks,... pero lo que más sorprende es la brutal pérdida de talla de Carmen, el cambio de orientación sexual de Nerea, el primer encuentro entre Valeria y Víctor, y sobre todo, un Adrián que parece otro personaje y con el que la serie parece querer ‘culpar’ a Valeria de todo lo que sucede. 

Así que mientras se cuecen las siguientes temporadas, resultaría recomendable leer los siguientes libros de la saga: Valeria en el espejo, con una protagonista en plena vorágine vital; Valeria en blanco y negro, donde aparece en escena Bruno y Valeria al desnudo con un Víctor omnipresente.