El alcalde de la Pobla de Montornès, el republicano Francesc Larios, habría recuperado los apoyos de los dos concejales de su mismo partido, Esther Giralt y Èric Vives, que el 27 de diciembre pasado pidieron su dimisión, solidarizándose con la también concejal, Nadine Osaer, a la cual el alcalde había retirado sus competencias, como manifestaron en comparecencia pública
Uno de los puntos fuertes del desacuerdo con el alcalde se dijo que era la propuesta de Larios de doblar el sueldo del concejal Daniel Guillén, cubriendo las mismas áreas que siempre. Este miércoles, Francesc Larios explicó que «una vez transcurridos los días y rebajadas las tensiones» las razones por las cuales retiró las competencias a Osaer «que no son otras que un cúmulo de circunstancias que se venían arrastrando desde hace mucho tiempo, con la consiguiente pérdida de confianza en su gestión, que provocaron una pérdida de confianza».
Pese a admitir que «ha faltado diálogo», el alcalde se mantiene firme en cuanto a apartar del gobierno a Nadine Osaer. No obstante, señala que «seguramente por precipitación e informaciones inexactas, Giralt y Vives, no habrían meditado suficiente lo de pedir mi dimisión». El alcalde ha aclarado que el doblar el sueldo a Daniel Guillén se debe a que, éste, habría solicitado un período de excedencia a la empresa donde trabaja «para dedicarse por completo a las tareas que tiene asignadas, visto el enorme trabajo que se nos viene encima», un punto que, por ahora, ha quedado aparcado.
Larios asegura que consta en acta que tanto Giralt como Vives «me aceptan como alcalde, no piden la dimisión y desean seguir trabajando como hasta ahora en favor de nuestro municipio».