Carlos Castillo no seguirá y apunta a candidato del PSC al Parlament

El concejal de Urbanisme i Seguretat Ciutadana del Ayuntamiento de Tarragona, Carlos Castillo (PSC), no seguirá el próximo mandato en el Saló de Plens de la Plaça de la Font. Según anunciaron ayer el propio edil y el alcalde Josep Fèlix Ballesteros, Castillo no formará parte de la lista que –por última vez– encabezará el candidato socialista de cara a las elecciones municipales del próximo 24 de mayo.

Pese a que tanto Castillo como Ballesteros afirmaron que la decisión se tomó ayer mismo, lo cierto es que la constatación del adiós del concejal confirma los rumores que desde hacía semanas situaban al edil fuera de la candidatura que la asamblea de la agrupación socialista de la ciudad aprobará el próximo jueves.

«Creo que ha llegado el momento de dejar la primera línea de la política municipal. No quiero ser un obstáculo para la gente que se sumará a la candidatura», indicó ayer un Castillo que se mostró «muy agradecido por el trato recibido».

Varias carteras de peso

Castillo (1975) es concejal desde que, precisamente, Ballesteros lidera el PSC en la Plaça de la Font, ya que inició su andadura como representante municipal tras las elecciones locales de 2003. Hasta 2007 estuvo en la oposición, pero con la victoria en los comicios de mayo de 2007 asumió carteras de máxima responsabilidad.

A lo largo de los ocho últimos años, Castillo se ha encargado de la concejalía de Seguretat Ciutadana, e inicialmente también se ocupó del área de Mobilitat, presidiendo la Empresa Municipal de Transports de Tarragona (EMT). En los últimos comicios ocupó el octavo puesto de la candidatura del PSC y, desde 2011, también dirige la concejalía de Urbanisme, siendo el coordinador del área municipal de Territori. Asimismo, también asumió temporalmente del departamento de Llicències.

A nivel orgánico, Castillo es una persona muy valorada por parte de los militantes. Por ello, forma parte de la ejecutiva de la agrupación local de la ciudad y también es presidente de agrupación comarcal del Tarragonès del partido socialista.

Una mandato movido

Pese a que es concejal desde hace 12 años, Castillo seguramente ha vivido durante el último mandato los tiempos más revueltos desde que forma parte de la administración municipal. El primer episodio lo vivió durante el verano de 2012, cuando protagonizó una polémica vía redes sociales con los vecinos del Barri dels Músics, a los que acusó de «pijos de familias con pedigrí que actúan como la kale borroka» por no aceptar la implantación de la zona verde de estacionamiento en su urbanización.

Posteriormente, a principios de 2014, el edil se vio imputado en el caso Highland por una presunta prevaricación en la tramitación de un expediente sancionador contra el establecimiento de ocio nocturno situado en la Rambla Vella. El edil fue a declarar ante la magistrada en marzo de 2014 y se mantuvo con esa condición hasta el pasado 19 de febrero, cuando recibió el auto de sobreseimiento de su causa.

Asimismo, Castillo –que lleva dos décadas militando en el PSC– fue el único concejal socialista que el pasado lunes no acudió a los actos organizados por la visita del Rey Felipe VI a la ciudad. A lo largo de todo el día, el edil mantuvo una fotografía con la bandera de la República en su perfil de whatsapp.

Cabeza de lista el 27-S

Ahora todo parece indicar que el rumbo que cogerá la carrera política del actual concejal es el Parlament de Catalunya. Abogado de profesión, en el último congreso socialista Castillo se desmarcó de la postura mayoritaria del partido y no apoyó públicamente la candidatura de Pere Navarro, sino que apostó por el actual máximo responsable del PSC, Miquel Iceta, quien será el candidato socialista a la Generalitat en las elecciones que se llevarán a cabo el próximo 27 de septiembre.

Ayer, Castillo no descartó esta posibilidad y aseguró que «no cierro la puerta» a continuar en la política activa y relevar a Xavier Sabaté como candidato.