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El Ayuntamiento de Tarragona sabe qué es trabajar con presupuestos prorrogados. Dos años consecutivos atados a las cuentas de 2021 supondría «trabajar más tensionados» y que «quizás no lleguemos a tiempo en algunos temas, que podrían tambalearse». Así lo expuso el concejal de Economia i Hisenda, Jordi Fortuny, quien defendió que «se trabajará hasta agotar todas las posibilidades» para que el próximo día 30 el pleno dé luz verde al último presupuesto de este ejecutivo antes de las elecciones municipales del mes de mayo.
Las inversiones de las ayudas Next Generation y la subida de los costes por la inflación son el telón de fondo de una propuesta de «contención», que incrementa los ingresos hasta los 186,4 millones de euros, de los cuales 10,7 estarán destinados a inversiones. Los otros 175,3 millones cubrirán la partida de gasto corriente de la casa.
Fortuny defendió que su ejecución supondría un «hito histórico» para el Ayuntamiento, ya que permitiría llegar a finales del año que viene con una deuda viva del 84%. «En 2019 la cifra era del 102% y esta bajada de 18 puntos es muy importante ya que permitirá estar muy cerca del 75% de endeudamiento, que nos garantizaría recuperar la capacidad inversora y salir de la situación de tutela por parte del Estado», apuntó.
El primer teniente de alcalde defendió que la propuesta que hace el Gobierno es «viva» y que hay «predisposición a trabajar intensamente hasta el último minuto, de cara al pleno, para incorporar las enmiendas» que puedan hacer el resto de partidos. De momento, el documento que ha dado a conocer el gobierno prevé un incremento del gasto corriente de 12 millones de euros respecto a 2021. Pese a ello, el Ejecutivo considera que «no será suficiente» y que habrá que jugar con el remanente para hacer modificativos de crédito y acabar de complementar las partidas que «de entrada no están bien dotadas».
En cuanto a la partida de inversiones, un tercio de los 10,7 millones de euros se centrarán en las actuaciones derivadas de las subvenciones de los fondos Next Generation. «Ponemos 3,5 millones para recibir ocho», expuso el concejal republicano. Proyectos como el intercambiador de Battestini para los autobuses, la recuperación del edificio del Banc d’Espanya, el Fòrum de la Colònia y la Zona de Bajas Emisiones están sujetos a la financiación europea, y en función de cada convocatoria esta aportación debe ser completada con recursos municipales.
Placas solares y luces led
Entre las prioridades que se ha fijado el Gobierno municipal está la instalación de placas solares en los equipamientos deportivos y la sustitución del alumbrado público por otro de tecnología led, más eficiente y que reduce el consumo. Dentro de este último apartado se incluye para el año que viene el proyecto para la mejora del alumbrado público del Parc de la Ciutat (248.535,25 euros). Fortuny defendió que «debemos trabajar para reducir la tarifa de la luz y para la creación de comunidades energéticas». Y, en este sentido, la partida para la instalación de paneles solares en equipamientos municipales –como escuelas, jardines de infancia y edificios municipales como la comisaría de la Guàrdia Urbana– asciende a 900.000 euros.
Destaca también una partida de 700.000 euros para mejorar la pavimentación de la ciudad y 500.000 euros para actuaciones del espacio público. Otro de los proyectos que se ha recuperado, que ya figuraba en el presupuesto del año pasado y que finalmente no pudo ejecutarse por la no aprobación de la cuentas, es la instalación de una red de baños públicos (150.000 euros). La propuesta también contempla la suma de 100.000 euros para la instalación de cámaras de videovigilancia en Ponent.
40 viviendas sociales nuevas
Fortuny también puso en valor que esta propuesta de presupuestos «sigue la línea política de continuar incrementando el parque social de vivienda de la ciudad, para dar respuesta a la emergencia habitacional e incidir en el precio de los alquileres». En este sentido, se quiere seguir apostando por las ayudas a la rehabilitación (230.000 euros) y se prevé que esta partida pueda completarse con otros 270.000 euros procedentes del remanente del año pasado, lo que supondría medio millón para esta línea de actuación. Esta la misma suma que se prevé ahora mismo para la compra de viviendas lo que, según los primeros cálculos, «nos debe permitir poder disponer del orden de cuarenta pisos».
El resto de formaciones políticas conocía el detalle de los presupuestos en la comisión informativa que se celebró ayer por la mañana, en la que se daba luz verde a este proyecto con los votos favorables del equipo de gobierno y los concejales no adscritos y la abstención del PSC y ECP. Por su parte, PP y Cs votaron en contra. Durante su comparecencia, el concejal de Economia i Hisenda hacía un «llamamiento a la responsabilidad» para que la aprobación siga adelante. «Peligran inversiones y también muchas acciones de ciudad de toda la vida. La situación sería realmente preocupante», dijo.
Fortuny aseguró que esta propuesta ya incorpora algunas de las enmiendas de En Comú Podem y que ayer mismo recibía otras propuestas del resto de formaciones, que se estudiarán. Y es que, según dijo, «por parte nuestra la disposición es total». La única línea roja que afirmó no estar dispuesto a pasar es la «ortodoxia».
