Ofrecerán formación continua a 28.000 trabajadores de la demarcación

Desde un curso avanzado de inglés a otro de técnicas de comunicación con personas dependientes para trabajadores de residencias; pasando por otro de control del estrés. Así de variada es la oferta para trabajadores que ofrece el Consorci per a la Formació Contínua de Catalunya, dependiente del Departament de’Empresa i Treball de la Generalitat y que este año espera llegar a 28.000 trabajadores en activo de la provincia de Tarragona (250.000 en Catalunya).

Así lo explicaban el Secretari de Treball, Enric Vinaixa y la directora del consorci, Ariadna Rectoret, a la par que anunciaban que este año el presupuesto para estos programas ha llegado a los 65 millones, de los cuales 23 provienen de los fondos Next Generation. En general se trata de un incremento de entre 35% y 40% respecto a años anteriores.

Señalaba Vinaixa que la idea es acercarse a la situación de otros países europeos donde la formación continua forma parte de la actividad ordinaria de las compañías. En este sentido animó a las empresas locales a aprovechar estas formaciones subvencionadas por la administración «queremos que sean ellas mismas las que nos impulsen a seguir destinando más recursos a esta materia, que ellas mismas creen la necesidad».

Acceso desde todo el territorio

Rectoret, por su parte, explicaba que una de las transformaciones positivas que ha generado la pandemia es el hecho de que muchas de las formaciones ya se pueden hacer on-line, lo que permite apuntarse a programas que se imparten en diferentes puntos de Catalunya.

Las formaciones que se ofrecen se centran en las necesidades de los sectores de cada territorio, en el caso de Tarragona hay muchas relacionadas con el sector social y educativo, el turismo y las empresas químicas.

Por otra partem hay una serie de formaciones transversales, como las relacionadas con los idiomas, las aplicaciones informáticas, la comunicación, la salud laboral y las habilidades personales.

Ofrecen, además, formación específica para obtener títulos y certificados profesionales, muchos de los cuales son necesarios para realizar algunas tareas, como por ejemplo uno para jardineros que deben aplicar productos fitosanitarios.

Señala Rectoret que entre los sectores en los que se ha detectado más demanda en los últimos años está todo lo relacionado con las energías verdes, como lo que tiene que ver con la instalación de placas fotovoltaicas, por ejemplo. Vinaixa ponía además el ejemplo de la planta de componentes para baterías eléctricas en Mont-roig del Camp y toda la industria auxiliar que se generará a su alrededor.

También son cada vez más demandadas todas las formaciones que tienen que ver con la tecnología en todos los sectores.

Respecto al nivel de los cursos explica que no solo se trata de formación básica, sino que también hay formaciones destinadas a profesionales universitarios.

La formación, además, no tiene coste para los trabajadores y más del 50% se acredita con certificados oficiales.

Destacaba Vinaixa que la oferta formativa se elabora con los representantes de los distintos sectores de cada territorio, incluidos los sindicatos.